MasterChef vivió una nueva gala de eliminación este domingo 18 de junio y los participantes dejaron todo para tener un lugar en la competencia. Actualmente el ciclo transita instancias finales y un mínimo error los puede dejar afuera de cumplir su sueño.
Es por eso que noche a noche tratan de cumplir los desafíos al pie de la letra y están mucho más concentrados que al principio. Asimismo, se muestran muy individualistas con sus ideas y no dejan que sus compañeros les den consejos. Este fue el caso de Antonio en la gala de eliminación, ya que no quiso recibir comentarios del balcón y sorprendió con su respuesta.
Ya iniciado el tiempo, los competidores tuvieron que realizar un plato con alcauciles, mandolina y carne y Rodolfo como buen compañero, decidió desde el balcón, consultarle qué tenía pensado cocinar para ayudarlo o darle su punto de vista.
“No tengo ganas de hablar”, lanzó mostrando poco interés. Y agregó: “Si yo necesito ayuda les pido”. Luego María Sol manifestó su buena voluntad: “Quisimos ayudarlo, pero nos dijo que ‘no quiere hablar’”.
Fue allí en donde él confesó: “Arrancó a cocinar y tengo que ir viendo qué es lo que voy a ir cocinando con cada utensilio”, dejando de tener que lo único que quería era estar concentrado para no fallar.