Y, un día, Marcela Tauro volvió a Intrusos, pero nadie sabe si para quedarse. Porque desde que empezó el nuevo ciclo del emblemático programa que Marce vio crecer, hace más de 20 años, la panelista faltó… ¡tres días de siete!
“¡Hacé lo que quieras, mamita!”, decía Moria y eso es lo que, dicen, suena en los pasillos de América ante cada nuevo llamado de la periodista, que obliga a la producción a apagar el incendio con reemplazantes a su altura, en estas primeras emisiones que son clave para instalar el programa, ahora con Flor de la V en la conducción.
En el canal vienen con suerte: el martes pasado convencieron a Luis Ventura de volver a sentarse en la mesa de Intrusos, después de ocho años y una salida traumática. Pero el periodista de Secretos Verdaderos trabaja en A la tarde y no va a estar siempre disponible para ocupar la silla.
Ante el segundo faltazo de la Tauro, se sumó Daniel Ambrosino, otro histórico del programa, que se quedará todo febrero en lugar de Tartu, que tiene otros compromisos en el mismo horario. Pero, ¿qué le estuvo pasando a Marcela? ¿No está convencida de esta vuelta?
Más allá de los deja vú y recuerdos que seguramente aparecen cada vez que entra en el estudio del que se fue peleada con Jorge Rial, la verdad es que la periodista pasó las últimas semanas bailando al ritmo del Covid.
Al día siguiente del debut, empezaron los efectos secundarios del refuerzo de la vacuna, que la dejaron 48 horas con distintos malestares, y esta semana la reemplazó Guido Záffora, otro ex Intrusos, cuando apareció en su horizonte el fantasma de la variante Ómicron, tan contagiosa.
"Estaba mal ayer, se notaba al aire, por eso me fui a hisopar. Comencé con energía pero terminé mal el programa", contó Marcela a PrimiciasYa, y aclaró: "Avisé de inmediato. El síntoma que tuve fue sueño, cansancio, cuando estaba al aire tenía frío y estaba muy baja de energía".
Sin embargo, por suerte al día siguiente Tauro volvió a sentarse a la mesa con Maite Peñoñori, Virginia Gallardo, Ambrosino, Lucas Bertero y Flor de la Ve, defendió a Lizy Tagliani de las acusaciones de su ex novio y se la vio espléndida y saludable, como siempre.
