Felipe Fort, disfruta de sus 19 años con una vida que lo saca de la normalidad debido a su padre. Si bien el joven y su hermana trataron de volver a mantener el bajo perfil luego de la muerte de su padre y Gustavo, eso es completamente imposible. Todo el tiempo son noticia, no solo por ser hijos de Ricardo, sino por el interés que genera su vida.
En las últimas horas, el joven se mostró en una concesionaria de autos reliquia y mostró, de esta manera, que igual que su papá Ricardo, tiene un gran fanatismo por los autos importados.
Con mucho glamour, él presentó el auto que podría ser su próxima adquisición. “¿Me combina con el color, papu?”, dijo él en el video que grabó su abogado. Junto a él se vio un BMW Isetta 300, uno de los microcoches más exitosos producidos en los años ‘50. El mismo, le hacía juego con su remera, ya que era roja y no se dejó intimidar por la cámara que lo estaba grabando.
El auto es pequeño y solo entran dos personas. Es por eso que agregó: “Está bueno, eh. Entramos vos y yo juntos, con un buen baúl”, lanzó Felipe Fort en tono irónico mientras habría y mostraba el interior del vehículo “burbuja” que apareció después de la Segunda Guerra Mundial.
Según se conoció, actualmente el vehículo se comercializa en exposiciones de autos clásicos como parte de la historia.
FELIPE FORT SE REGALÓ UN VIAJE AL CARIBE POR SU CUMPLEAÑOS
El joven disfruta del dinero que dejó su padre y no teme en gastarlo. En febrero pasado, el joven cumplió 19 años y compartió las lujosas vacaciones que emprendieron junto a su novia, un lujoso spa all inclusive de Cancún.
Desde el lugar compartió lo que fue su estadía y parte del festejo que hizo por su natalicio. Los comentarios sobre su vida y sus lujos no tardaron en llegar en las redes sociales, teniendo en cuenta que todavía es muy chico.