A poco menos de dos semanas del comienzo de Gran Hermano 2022 las mujeres que entraron a la casa están más ardientes que nunca y en las últimas horas, Juliana Díaz fue una de las que más llamó la atención luego de que creciera su vínculo con Max.
La morocha, tiene 31 años y es de Venado Tuerto, Santa Fe y vive sola con su mamá. Con un cuerpo espléndido disfruta de posar en sus redes sociales y muestra sus particulares Tattoo.
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Cabe destacar que con una personalidad arrolladora, supo llevarse bien con la mayor parte de la casa y se ganó el corazón de Maxi, un vínculo que crece y que cada día está más caliente.
El joven cordobés y la santafecina se mostraron muy enamorados en la pileta. Hubo mimos y muchos besos en la agua. Ahora, quieren ir por más.
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Si bien fueron frenados por el big brother los últimos días cuando tuvieron un encuentro tapados en una cama, se dieron cuenta de que tienen que contener sus deseos porque no hay un lugar en la casa que esté exento de quedar expuesto ante el "ojo" que todo lo ve.
“Es increíble cómo las personas siempre terminan haciendo lo que yo quiero. No salgo a comprar el pan sin estar maquillada”, había expresado la joven antes de entrar al reality e indudablemente es toda la verdad.
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