En medio de las restricciones que impone la virulenta segunda ola de covid 19, Jony Viale encabezó el triste y conmovedor cortejo familiar que le tributó el último adiós a su papá, el periodista Mauro Viale.
Los restos de Mauro, quien falleció en la noche del domingo 11 de abril un día después de ser internado por un cuadro severo de coronavirus, fueron trasladados al cementerio israelita de La Tablada, donde se desarrolló una íntima y muy sensible ceremonia.
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Mauro, que tenía 73 años y trabajó hasta el último viernes en sus múltiples ocupaciones profesionales (conducía programas de lunes a viernes en Radio Colonia y en A24 y los domingos en América), fue velado por un puñado de horas en una casa ubicada en Loyola al 1100, en el barrio porteño de Villa Crespo.
Hasta allí se acercaron algunos colegas, allegados y conocidos para ofrecer sus condolencias a los familiares del periodista y conductor. Todos, por supuesto, guardando las normas sanitarias sugeridas como mantener una distancia de dos metros y evitar abrazos, besos y demás demostraciones de afecto extremo.
Avanzada la mañana, mientras el sol empezaba a calentar una jornada de tradicional fresco otoñal, un grupo muy reducido de familiares muy cercanos de Mauro se trasladó hasta la localidad de La Tablada, en el partido de La Matanza, donde se encuentra el cementerio Israelita.
Esa, desde hoy, se transformó en la última morada del reconocido periodista. Las escenas de dolor y de angustia se multiplicaron en cuestión de minutos. Mauro era muy apegado y muy unido con sus familiares. Su esposa Leonor, sus hijos Mauro e Ivana, y sus nietos.
Por haber tenido contacto estrecho con él, tanto Ivana como Leonor, su viuda, permanecen aislados y no pudieron acompañarlo en su despedida. Pero lo acompañaron con el sentimiento y lo llevan en el corazón.
IMAGENES: ALEJANDRO CARRA
