La vida le sonríe, literalmente. Todo ha cambiado para Lizy Tagliani, con la concreción de ese anhelo tan profundo y emotivo de convertirse en madre, lo que se transmutó en una realidad con la llegada a su cotidianidad y su mundo de su hijo Tati, a través de una adopción .
La articulación familiar con su esposo Sebastián Nebot y el pequeño marcha sobre rieles, con todos los desafíos de esta novedad absoluta para la conductora. En ese sentido, la famosa suele compartir sus reflexiones, cada uno de los pequeños pasos que transitan juntos.
La animadora de Telefe luce embelesada y principalmente muy emocionada por este viraje en su cotidianidad, por todo lo que le moviliza en sus fibras más íntimas cumplir el sueño de la maternidad. Por eso se le ilumina el rostro al referirse a su pequeño.
Claro que las espinas brotaron en el extenso camino del proceso legal. Incluso, Lizy acaba de revelar que su condición de famosa, de personalidad pública, se convirtió en un problema, una especie de impedimento que estuvo a punto de desmoronar la adopción.
LA EXIGENCIA QUE LE PUSIERON A LIZY TAGLIANI PARA PODER ADOPTAR A SU HIJO
En una entrevista con Caras, Tagliani reveló ese dato desconocido hasta el momento y narró con mucha honestidad: “Yo tenía en contra el tema de ser conocida, por la exposición del niño. Por eso le decía a Sebastián que no se ilusione”. Toda una adversidad en el procedimiento.
Inmiscuida en esa postura de confesar lo que aconteció en esa etapa y la charla que protagonizó con la jueza a cargo del trámite, Tagliani explicó las palabras que le extendió la letrada: “Tenés que comprometerte a cuidar a Tati de la exposición. Si estás dispuesta, la familia para él son ustedes”.
