Rocío Moreno y Paulo Londra acaban de convertirse en padres por segunda vez; el lunes a la mañana llegó al mundo Francisca. Sin embargo, la joven cordobesa que en 2015 inició una relación con el cantante con el sueño de formar una gran familia, estuvo lejos de vivir una “una dulce espera”.
Porque durante este último embarazo, Rocío tuvo que hacerse cargo sola de su hijita Isabela, mientras Londra hacía la suya, desatendiendo sus responsabilidades. Es más, el artista viajó a Estados Unidos y ella se enteró por las redes.
Poco antes de empezar a buscar a su segunda hija, Londra empezó a salir más. “Estaba ausente en la casa y cada vez volvía más tarde o prácticamente no volvía”, contó ella a Infobae, cuando reveló que estaban separados de hecho, porque nunca había mediado ni una charla.
Las semanas pasaron y el nacimiento se acercaba, Paulo volvió al país, le dedicó su regreso a la música a su hija Isabela (obviando la llegada de la beba) y no fue al baby shower. Sin embargo, sí estuvo presente para la llegada de Francisca, aunque no en el parto, que Rocío atravesó acompañada por su mamá.
“Te amo princesa, hermanita menor hermosa. Dios te proteja siempre”, expresó en sus redes en una foto donde se lo ve acariciándola en neonatología. Y ahora, lo que lógicamente exige Moreno es que, además de Dios, sus hijas puedan contar con un padre responsable.
Es por esto que decidió llevar su reclamo a instancias judiciales y, de la mano de la abogada Ana Rosenfeld, demandó a su ex para que cumpla con la cuota alimentaria, garantice todo lo necesario para su crianza y la resarza, de alguna manera, de haberla dejado sola con su hija y embarazada.
“Hubo un llamado de Paulo a Rocío diciendo que él no sabía de la situación de la cuota alimentaria, porque había dejado todo en manos de abogados y le dijo que le iba a garantizar todo lo que necesite y que iba a estar”, dijo Maite Peñoñori en Intrusos, mientras hablaban del tema.
Tal como informaron en el ciclo de América, Rocío quiere que las nenas tengan un lindo vínculo con su papá, pero se tienen que “resolver las cuestiones económicas”. "Conozco el monto que pide y no le está pidiendo una fortuna. No lo puedo decir, pero creo que se está quedando corta por lo que cuesta todo", agregó el periodista Pablo Layus.
Es que, además de la cuota alimentaria, Layus informó que la joven le pide a su ex un resarcimiento por haberlo acompañado en su carrera y haber dejado sus cosas. Además, según contó Maite, Rocío también exige contar con el apoyo de una niñera, dado el trabajo implica cuidar a dos criaturas ella sola.
"Es cierto que Paulo andaba con la Play en el primer parto. En este no, acompañó a la bebé en neo y después vino a la habitación para preguntar cómo estaba Rocío. Tratamos de no ser dos bandos de familia, es algo que lo tienen que solucionar los chicos, no es sano estar mal”, dijo Marina, ex suegra de Paulo, a horas de ser abuela.
