El 27 de abril de 2014 nació Antoñito, el hijo menor de Luis Ventura, un parto antes de tiempo que le trajo al niño diversas secuelas neurológicas. Y ahora, más tranquilo luego del difícil momento que vivieron con Fabiana Liuzzi con la internación del nene, Ventura recordó cómo fue su llegada al mundo.
En diálogo con el médico divulgador Guillermo Capuya, Luis se refirió a ese embarazo que terminó de manera prematura. “Antoñito nació pesando menos de un kilo, estuvo 54 días en neonatología en una clínica en la capital de Córdoba. Y nació prematuro, si no me equivoco, de seis meses y medio”, dijo.
El conductor de Secretos verdaderos señaló que “hay datos que muchas veces se contraponen” porque el nacimiento sucedió “en el medio una situación compleja en cuanto al dibujo familiar”. “Eso jugó algún partido debido a que había que asumir responsabilidades y tomar decisiones”, reconoció.
“Y esas decisiones, muchas veces, se toman sobre algún dato erróneo. Prácticas y aplicaciones que tendrían que haber ido para un lado, fueron para otro. Y, a lo mejor, puede ser que eso haya incidido sobre el diagnóstico posterior de mi hijo. Hubo cosas que se deberían haber hecho y no se hicieron”, estableció.
A la vez, Alejandro Anderson, el neurólogo del hijo de Liuzzi, agregó datos. “Hay un cuadro que se llama encefalopatía crónica no evolutiva, eso significa tener lesiones cerebrales, pequeñas o grandes por falta de oxigenación. Él tiene pequeñas lesiones en área del lóbulo temporal izquierdo”, explicó.
Ventura aclaró: “Antoñito es un chico lleno de vida. En estado natural él tiene la energía de un chico de ocho años. Pero el tema es cuando él debe enfrentar la bajada eléctrica de la descarga de su cerebro. Por ejemplo, vos lo tenés abrazado, y cuando le baja esa descarga eléctrica lo sentís en su cuerpito”.
“Él primero vivía en Córdoba, pero después vino acá para tener una conexión mucho más intensa con determinado tipo de profesionales e institutos. Con su nacimiento yo cerré una etapa de mi vida e inicié otra completamente diferente, donde no sabía nada de nada”, cerró, emocionado.
