Luisana Lopilato vivió semanas muy convulsionadas, todo el mundo habló de ella, hasta se desarrollaron análisis de lenguaje corporal y se elucubraron muchas teorías. Todo surgió por los modales de Michael Bublé en los vivos de Instagram, lo que los llevó a estar en el ojo de la tormenta.
Tanto se habló, tanto se escribió, tanto se auscultó el trato del cantante, que la pareja se cansó y tomó una decisión tajante. Según informaron en el sitio de Laura Ubfal, este jueves será la última transmisión en la plataforma digital.
Evidentemente, Luisana se hartó de que se analice cada movimiento, cada gesto, cada movimiento en estos videos. Algo que se tornó casi un tema nacional, más allá que muchas voces parten de una buena intencionalidad de cuidar a la actriz y ayudarla.
Dentro de todo esta polémica, el manager de la rubia confirmó que se llevará adelante una acción judicial al autor de ese video fake que circuló en Twitter. Se trataba de una edición motorizada en una mala intención, en la que se buscó manipular todo y hacer coincidir comentarios en los vivos con acciones de Luisana, como tocarse el pelo o la nariz. Esta persona ya fue identificada y ahora será el turno de llevarlo al ámbito judicial.
Luisana Lopilato desmintió los malos tratos
Hace unos días, la bella rubia salió a las redes para sentar su posición y refutar todos los rumores. En esa oportunidad, la actriz escribió: “Con mi marido salimos todos los días a hacer vivos para llevarles un poco de alegría, entretenimiento, añoranzas, y tenemos que soportar escuchar y ver lo que publican personas malintencionadas que salen a hablar cualquier cosa sin conocer nada de mi familia. Lo volvería a elegir una y mil veces. No es justo. No voy a permitir que le falten el respeto a mi familia”.
