Es una de las actividades que nunca estuvo prohibida durante la cuarentena. Sin embargo, Malena Narvay prefirió profundizar las medidas de prevención y recién ahora sacó a pasear a su perro por primera vez en lo que va del aislamiento.
Poco después, la actriz subió a sus redes un video con el resultado de la salida. Y las imágenes resultaron sencillamente conmevdoras: el tierno pichicho se aferró a ella de tal manera que los dos quedaron parados y “abrazados” por un largo rato en el medio de la vereda.
Acostumbrado al calor y a la quietud del hogar de la muchacha, a Ciro le dieron miedo el movimiento, los ruidos y el resto de las circunstancias distintas de las que está acostumbrado a olfatear “adentro”. “Llevé a mi perro a pasear por primera vez y le daba tanto miedo la calle que no me soltaba” escribió ella, junto a un emoji de llanto y cuatro corazones rojos.
Los comentarios de sus seguidores llegaron enseguida. Los “te amo” inundaron su timeline. Simpática, ella comentó que el perro se le aferró con tanta fuerza al cuerpo que le terminó llenando la ropa de tierra. Male no se hizo ningún problema y le dio cobijo, como hizo poco antes de que empezara la cuarentena.
Tres días antes de que arrancara el período de encierro que está por cumplir dos meses, allá por el 17 de marzo, Malena descubrió a Ciro revisando fotos de Instagram: lo estaban por dar en adopción. Después de soñar con él, decidió que era momento de ir a conocerlo. Fue con sus padres. Convencerlos de llevarlo a casa no le costó nada.
Dos días después decretaron la cuarentena y Ciro se transformó en un gran compañero de esta época de soledades y pocos contactos. En medio de la pandemia, la actriz confirmó el final de su relación con Julián Serrano. Cuando estaban juntos eran mascoteros: habían adoptado un conejo que murió hace pocos días.
Tras la ruptura, Malena dio una serie de declaraciones que no dejaron bien parado al galán entrerriano. Para sus fanáticas, que se cuentan de a miles al menos en sus cuentas en las redes sociales, Serrano pasó a ser “el tóxico”. Obviamente, aún no se le conocieron otros pretendientes.
