Si bien Gran Hermano hoy es un éxito televisivo tanto en nuestro país como en otras partes del mundo, en Argentina tuvo su primer finalista allá por él años 2001. En aquel entonces todo era nuevo, todo era más naif y lejos estaban los personajes, las estrategias y las traiciones. Al menos, no tan marcadas como hoy.
Pero… ¿quién fue el primer ganador del formato local? Marcelo Corazza, quien hasta entrar al reality era un joven profesor de educación física y entrenador de rugby. Y si bien disfruto de la experiencia del ciclo de Telefe, llegó allí casi de casualidad ya que en un principio lo que él quería era entrar a Expedición Robinson, otro especial que se daba en El Trece y que tenía que ver con la experiencia de supervivencia.
No habiendo podido ingresar a ese programa, y siendo que quedó fuera del casting de GH, la gran oportunidad de Corazza llegó cuando un hermanito decidió abandonar la Casa y lo convocaron para que entrara en su lugar. A partir de allí, el deportista y hoy productor del canal de las pelotas fue blanco fácil de ataques y nominaciones.
A la distancia, y desde su experiencia y actual rol de panelista en los Debates de Gran Hermano, Marcelo habló de cómo ve esta nueva y exitosa edición del reality y a los participantes con los reingresos. “Es un shock para los chicos, pero también para los que entran. Los que reciben gente dicen 'Uh, la puta madre, otra vez volver a remar todo esto' empezando a sospechar que el que está afuera vio todo”, comentó.
Y, en diálogo con LAM, Corazza agregó: “En el caso del que entra también es muy difícil, lo digo con experiencia. Es muy difícil meterse por más que entres o no con información, es muy difícil meterse en el juego, jugar, poder ser parte y aguantar si te dejan a un lado o si no te dan bola porque son 24/7 todos los días. Es una dinámica nueva dle juego a partir de este ingreso".
"No me gusta cuando festejan el juego de la traición. Yo era feliz nominando y mandando a placa al que me hinchaba las pelotas", confesó el ex ganador
Asimismo, el primer ganador de GH se refirió a los motivos por los cuales entro al reality y sumo: "El juego es un juego de convivencia, lo primero que tenemos que hacer es tratar de convivir con la gente, no entrar a ver con quién me peleo, a quién nomino, a quién traiciono. No me gusta cuando festejan el juego de la traición porque es como decir 'Ah, mirá que bien juega, mirá cómo traiciona'”.
“No me parece noble, no me parece bueno. A mí me parece que está bueno tratar de integrarse, de sumar y de convivir con la gente. Después el momento de nominar es otra parte del juego porque uno quiere ganar. La parte más divertida del juego es nominar. Yo me sentaba ahí y era feliz nominando y mandando a placa a quien me hinchaba las pelotas", cerró Corazza.
