La vuelta de Marcelo Tinelli a la televisión prevista para el mes de junio viene teniendo sus complicaciones. Con la pandemia de Covid-19 que registra su record de casos en el país día a día, el conductor recién podría salir al aire entre fin de julio y principios de agosto.
El Bailado por un sueño 2020 está definitivamente descartado, ya que implicaría potenciales riesgos de contagios por la cercanía que se necesita entre los participantes para bailar. Dispuesto a enfocarse en la vuelta del humor y recuperar la vieja esencia de ShowMatch, el conductor está a la espera de que desde el gobierno nacional le habiliten la propuesta de protocolo en su segunda versión (la primera fue rechazada), considerando como base que el propio Marcelo tiene 60 años y es considerado persona de riesgo.
De tener el ok sobre las medidas y pasos preventivos a seguir, serían seis personas la que incluirían la mesa central del programa con panelistas. Se recurriría a los viejos personajes (ninguno de los humoristas que serían de la “partida” aún firmaron contrato ni están cobrando), que tanto rédito en rating supieron darle
Las cámaras ocultas operativamente serían imposibles de llevarse a cabo porque implicarían hacerlas en las provincias donde no hay casos de infectados. "También está lejos Pampita de ser una de las capitanas del segmento. No puede viajar por todos lados. Quizás sea como una mano derecha de Marcelo, pero no va a estar en todo el país", comentaron.
Otro de los conflictos que se avecina es que de concretarse la salida al aire ya no necesitarán los once cámaras en relación de dependencia, y se estaría evaluando despedir a cinco empleados de La flia.
El mismo Tinelli, desde su cuenta de Instragran, habló de la posibilidad de que este sea su último año en pantalla: “No lo sé. En 1990 pensaba que era mi primer y último año. Llevo 31 jaja”, respondió.
LAS PREOCUPACIONES
Por estas horas, el también periodista está nervioso porque se habría detectado un caso de Covid en la pensión de las chicas de San Lorenzo, club del cual es Presidente. La noticia se habría conocido el día que tenía previsto ir a Corte y confección (pegó un faltazo) y este tema habría sido prioridad en su agenda.
Por otro lado, Marcelo Gallardo, un referente importante en el mundo del fútbol desde el puesto de DT de River Plate, lo criticó a él y al Chiqui Tapia porque los equipos de primera no están entrenando.
Y, como si fuese poco, los intercambios de opiniones con Guillermina Valdés, su tercera esposa, serían frecuentes. A consecuencia, si bien no están separados, las discusiones entre ellos se fueron agudizando y no convivirían en el mejor de los climas. Pasan juntos todos los momentos (como el cumple de Helena), pero hay rispideces.
Algunas versiones señalan que desde antes de la cuarentena no usan sus anillos de compromiso, pero a Marcelo sí se lo vio con él y siguen viviendo bajo el mismo techo. Ella, en tanto, ¿en señal de protesta?, sigue sin usarlo.
