Con el paso del tiempo y gracias a sus importantísimos trabajos en la televisión argentina, María Rosa Fugazot se transformó en una de las actrices más reconocidas a nivel nacional, habiendo hecho desde comedias hasta dramas que calaron hondo en el público que la aplaude de pie ante cada presentación.
Con el fin de recordar su amplia trayectoria y para contar anécdotas nunca antes reveladas, la artista estuvo como invitada al ciclo Los Mammones en donde mantuvo un divertido e intenso ida y vuelta con su conductor, Jey Mammon.
Además de hablar sobre sus días junto a Olmedo y Porcel y rememorar cómo fueron sus inicios en el teatro, María Rosa contó que no fue fácil compartir camarín con distintas modelos y bailarinas de aquel entonces, que no solo se burlaban de ella por aún ser virgen, sino que además de le intentaron hacer maldades que ella logró descubrir.
“Cuando empecé, cuando era bailarina, me pusieron vidrio molido en el maquillaje. Y no me corté porque había una chilena, que también era bailarina y compañera mía que estaba sentado a mi lado y cuando agarré el pote me dijo ‘no te la pongas’. Era la crema de la cara”, explicó la cantante y actriz dejando sorprendidos a todos los presentes.
No obstante, cuando Jey le preguntó si alguna vez supo quién había sido la autora de aquel aberrante hecho, Fugazot dejó en claro que sabía y que decidió tomar represalias en el asunto, además de confesar que no escatimó a la hora de su venganza: “Había tres o cuatro, pero yo la solucioné en seguida”.
“A una le tiré un vaso que le pasó por adelante de la cara y le dije ‘la próxima te la zampo en la jeta, así de claro’. Y a la otra le puse el pie y se cayó por la escaleras y también le dije ‘la próxima te piso directamente’”, apuntó sin filtro María Rosa causando un mayor asombro en los integrantes del programa y un par de aplausos por “marcar el territorio”.
"Me pusieron vidrio molido en el maquillaje. Así que a una le tiré un vaso que le pasó por adelante de la cara y le dije ‘la próxima te la zampo en la jeta’; y a la otra le puse el pie y se cayó por la escaleras"
De todas maneras, dejó en claro que no es asidua a las peleas y que solo busca defenderse en caso de ser atacada: “Yo no soy agresiva con nadie, pero cuando se trata de defenderme… agarrate Catalina. La prueba está en que fueron dos o tres veces y nunca más jodieron. También me cargaron porque era virgen, me decían ‘ay, la virgencita, pobrecita la virgencita’”.