Mario Massaccesi optó por romper con una cotidianidad que tenía en su manera de trabajar y salió de su zona de confort. La propuestas que le hicieron para conducir un reality tan importante como Cuestión de Peso llevó a que el presentador cambie toda su agenda.
Hasta fines de este año tenía trabajos cerrados y diferentes proyectos, pero llegar como la figura y cara visible de un programa tan importante de Canal 13, sin dudas que le movió el piso y no dudó en aventurarse a este desafío único.
Feliz con su presente, Mario sorprendió a propios y extraños al confesar que es una persona que tiene algunos complejos con su cuerpo. Por ejemplo, él era alguien que no podía estar en traje de baño y que para eso decidió hacer un taller de sanación genital.
Siendo una decisión muy personal e íntima, detalló de qué se trata: “Tiene que ver con los tabúes respecto del la sexualidad que vienen heredado de la propia familia. Hay momentos en que necesitás desprenderte de eso”.
Aunque actualmente sigue trabajando en el pudor que tiene con su cuerpo, al verse al espejo y la mirada del otro, este taller lo ayudó mucho. Ahí entendió que no es el único que tiene esa sensación y se encontró con personas que atraviesan por algo similar.
MARIO MASSACCESI DECIDIÓ ENFRENTAR LOS TAPUJOS CON SU CUERPO
“Yo tenía, sigo teniendo pero mucho menos, pudor de mi cuerpo. No me gusta estar en traje de baño, he ido a playas nudistas pero vestido, me gusta la libertad pero me cuesta ejercerla. Fui al taller para liberar ese pudor y esa vergüenza”, comentó Massaccesi en el programa de Sebastián Weinraich, La noche perfecta.
Debido a que no es algo tan común ni tampoco se conce demasiado, su colega quiso saber cómo es que llegó a anotarse en ese taller: “Fue al final de la cuarentena, cuando había talleres de todo tipo. Ya estaba aburrido del taller de masa madre, vi esta opción que me llamó la atención y me anoté. Era presencial pero estábamos todos con barbijo, una locura”.
Y al finalizar también agregó: “Éramos todos hombres y fue muy loco ver que había muchos casados que necesitaban sanar genitalmente. Para mí de verdad fue muy bueno”.
