El lunes 25 de diciembre, la casa de Gran Hermano despidió a Axel, el segundo participante eliminado del juego. Y Martín Ku, el líder de la semana, no pudo evitar quebrarse en el cuarto ante sus compañeros, cuando la gala terminó y pudo, al fin, distenderse.
Es que Martín había querido usar su beneficio como líder de la semana para salvar a Axel de la placa, pero un insólito error invalidó esta posibilidad. Como el joven de Viedma había dado a entender su decisión previamente, GH no le permitió sacarlo de la votación, por romper con el reglamento.
Rodeado de Manzana, Denisse e Isabel, Martín se descargó sobre su almohada. "No estoy triste. Estoy enojado conmigo mismo… Soy un pelotudo", dijo Ku, a lo que la abuela sexy le dejó una recomendación.
“No estés triste, amigo. Ese enojo capitalizalo para mañana, porque sino se van a seguir yendo personas que queremos. Lo hecho, hecho está. Hay que capitalizar lo perdido, no te sientas mal, ya pasó, ya está. ¿Qué vas a hacer?”, le dijo De Negri.
LA PREOCUPACIÓN DE MANZANA ANTE EL PODER DE FURIA EN GRAN HERMANO
“Ese grupo se está consolidando, hay que tener cuidado. Atrás de Furia hay todo un grupo”, señaló Manzana, preocupado ante la grieta que se armó en el reality, al darse cuenta del poder que tiene Juliana Scaglione con lo que genera, tanto dentro como fuera del programa.
“Está claro que ese grupo tiene fuerza, que Furia no se va a ir”, añadió Manzana, leyendo bien el juego que se está dando en las primeras dos semanas del show. Por su parte, Isabel De Negri agregó, para consolar a Martín Ku, que Axel no jugó: “Axel no hizo nada para ganarse a la gente”.