La batalla entre Cinthia Fernández y Matías Defederico continúa vigente desde hace más de tres años, cuando ambos tomaron la decisión de separarse. Sin embargo, desde ese entonces comenzó una pelea por la cuota alimentaria, el tiempo y el cuidado de sus tres hijas.
Este jueves, el futbolista decidió romper el silencio y le brindó una nota al ciclo Hay que ver, para defenderse de los duros dichos de la panelista, y además, para revelar delicados detalles de la vida familiar.
Charlando con José María Listorti y su panel, Defederico aclaró que siempre prefirió mantenerse al margen de la pantalla chica porque es el territorio de Cinthia y que considera que las fuertes palabras son “parte de su show”: “Hace tres años de esta separación y creo que di una sola nota en Los Ángeles de la Mañana porque recién nos separábamos y era un boom, había mucha presión en todos lados y a veces dar una nota es descomprimir un poco”.
No obstante, el deportista se mostró molesto porque la ‘angelita’ involucró a las pequeñas en el circo mediático, y apuntó contra ello: "Yo jamás me metí en el ambiente de ella y si contesté o dije algo es por algo que ella me tiró. Pero creo que hay un límite en muchas cosas y en este caso mis prioridades son las nenas. Yo siempre hablé muy bien de ella como madre y lo voy a seguir haciendo, aunque tengamos nuestras internas como tenemos todos los separados”.
"Me llamó llorando mi hija porque la madre estaba hablando mal de mí delante de ellas. No está bueno estar a 600 km y que me llame llorando porque me quería defender"
Pero el reproche contra Cinthia llegó de la mano de una dura experiencia que le tocó vivir como padre, cuando una de sus hijas quiso hablar con él para revelarle que su madre lo criticaba a sus espaldas: “Todo bien hasta que un día te llama tu hija por teléfono llorando, que es la única conexión que tengo por mi trabajo, porque la madre estaba hablando mal de mí delante de ellas... Hay un límite. Yo a veces entiendo el show mediático, entiendo todo porque viví al lado de ella, pero hay un límite".
"Yo me como la jodita, los chistes, las bromitas, porque es parte del show de ella y lo entiendo; es un decorado que hace y está bárbaro, pero hay un límite, una interna que es nuestra, y son nuestras hijas. No está bueno que yo esté a 600 km y mi hija me llame llorando porque me quería defender. Ver sufrir a mis hijas, es el límite” agregó dolorido Defederico.
Para concluir, el futbolista explicó que no puede mantener comunicación directa con Fernández ya que ella lo tiene bloqueado en las redes sociales y en el teléfono, y aclaró algunos puntos de la cuota alimentaria: “Estaba estipulado un monto más alto cuando yo jugaba en Grecia porque claramente cobrabra en euros. Pero yo laburo tanto como labura ella, y siempre, estando o no juntos, le di la libertad para moverse en los medios como ella quiera”.