El pastelero Mauricio Asta (46) forma parte de los medios de comunicación desde hace 20 años. Sin embargo, su llegada al programa El Gran premio de la cocina como jurado, junto a Felicitas Pizarro y Christian Petersen, le dio popularidad.
Y durante una charla con Catalina Dlugi, para el ciclo radial Agarrate Catalina, el experto en pastelería recordó el momento en que le dijo a su familia que era gay.
“Fue difícil en un comienzo porque mi familia está compuesta por padre inmigrantes italianos grandes, muy tradicionales, campesinos, y recalco esto porque es diferente nacer en una gran ciudad que en un campo. Mi familia era muy de un gueto italiano y no tenían tanto conocimiento de la diversidad sexual como hoy día se conoce", empezó diciendo.
Explicó además que jamás sintió rechazo. “Nunca me rechazaron porque me aman pero sufrieron porquepensaban que era una enfermedad y que yo iba a ser rechazado y maltratado. Ellos pensaban que hicieron algo mal para que yo sea así. Fue doloroso para mí porqueel eje de todo este dolor era yo”, detalló.
Y después comentó que creó una estrategia para evitar sufrir maltratos. “Siempre tuve el recurso de que antes de que el otro me cargue o agreda o haga un tipo de bullying, yo me adelantaba y expresaba de una forma cómica esta parte de mi ser, entonces de alguna forma esto me ayudó para poder tener poder sobre mí”, dijo.
Sin embargo, Mauricio Asta recodó su adolescencia como un momento difícil. “Cuando uno empieza a intentar tener identidad y relacionarse en grupos con gente afín, ahí empecé a tener problemas porque me encontraba solo y pensé en algún momento que yo era el único que sentía eso”, evocó.
“En ese momento la pasaba realmente mal y ahí emrendí un largo camino y fue un gran desarrollo personal siempre de mano de espacios terapéuticos porque hice veinte años de psicoanálisis”, concluyó.