Mauricio Dayub detalló la dura etapa que atravesó de joven, antes de ingresar al mundo de la actuación y de a poco convertirse en uno de los artistas más valorados de la escena nacional, elogiado por la crítica y más taquilleros en las boleterías teatrales. Confesó que supo no tener donde vivir ni un trabajo estable. Y se sinceró al explicar cómo hizo para superar el difícil trance.
En una entrevista con Agustina Kampfer para Algo que contar por IP, el actor y director compartió sus inicios en el mundo del teatro hasta que llegó su primera oportunidad para empezar a demostrar cuál era su verdadera vocación.
"Trabajé en una boletería. En ese momento yo estaba muy lejos de la posibilidad de ser actor: trabajaba pintando departamentos y haciendo cosas de albañilería", rememoró Mauricio en el programa de tevé sobre la ocupación con la que se ganaba la vida antes de insertarse de lleno en el trabajo sobre las tablas, el cine y la televisión.
"Una noche, una chica me dio la posibilidad. Le conté que no tenía trabajo, que no tenía dónde vivir y me dijo: ´Yo trabajo en una boletería, hace falta alguien los sábados y domingos´. ¡Ya estaba cerca de un teatro!", contó Dayub en el cara a cara con la periodista.
"¡Alguien iba a entrar, algún actor, un director o un productor! Así que lo hacía con mucha alegría, me gustaba mucho ese trabajo. La posibilidad de tener un teatro a futuro, como tengo hoy, también nace ahí", remarcó Mauricio, sobre su objetivo final a la hora de aceptar el acercamiento que le habían ofrecido al teatro.
“A la tele me encanta hacerla, pero es verdad que nadie me dio un rol en el que yo pudiera verme plenamente, desarrollando mi capacidad como actor. Siempre hice papeles para resolver un casting. Casi siempre hice trabajos que rechazaban otros actores. Y siempre supe quién era el que había rechazado, detrás de quién venía. ¡Y no era uno, eran tres! Eso es bastante común en nuestro trabajo”, reconoció Dayub, sobre algunos de los personajes que se los vio haciendo en la pantalla chica.