Mica Viciconte habló recientemente sobre cómo equilibra la crianza de Luca, su hijo con Fabián Cubero, sin dejar de lado momentos de disfrute y hábitos sostenibles. Entre confesiones sobre su dinámica familiar y nuevas iniciativas en su hogar, Mica mostró una faceta comprometida con la salud y la naturaleza.
En una entrevista, Mica reveló cómo ha adaptado su enfoque hacia la alimentación y los hábitos de su hijo a medida que ha crecido. "Al principio era muy estricta con la comida", admitió. Sin embargo, con el tiempo, ha aprendido a relajarse un poco y permitir pequeños placeres para su hijo. "Come sano, pero si le das un helado se vuelve loco de la alegría. Entonces no lo privo de eso, aunque no le doy dos por día. Es uno cada tanto", explicó.
Durante la semana, la casa de los Viciconte-Cubero sigue una rutina alimenticia estricta: nada de gaseosas ni excesos. Pero los fines de semana, el enfoque cambia. Mica detalló que estos días se convierten en un espacio para disfrutar de "permitidos", como un chocolate, un helado o incluso hamburguesas con papas fritas. "Vía libre para pedir algo rico", señaló la conductora.
La crianza de Luca también es un esfuerzo compartido con Fabián Cubero, aunque Mica admitió que tienen personalidades muy diferentes. "Él tiene voz y voto, pero la única línea que sí mantenemos es no contradecirnos frente a él para no desautorizarnos", destacó. Esta filosofía de crianza compartida ha ayudado a crear un ambiente estable para Luca, donde las reglas y la flexibilidad coexisten de manera armónica.
Mica se define como una madre estructurada y enfatiza la importancia de mantener hábitos en la vida de su hijo. "Los hábitos son fundamentales en chicos y también en grandes", afirmó. Durante la semana, Luca sigue una rutina que incluye horarios claros para comer, dormir y levantarse. Aunque los fines de semana son más relajados, las normas básicas, como desayunar y dormir a una hora razonable, permanecen.
Para Mica, esta estructura no solo es crucial para el desarrollo de Luca, sino que también crea un equilibrio necesario en el hogar. "Soy estructurada, pero también entiendo que la infancia es para disfrutar, así que siempre busco el balance", reflexionó.
En línea con su compromiso con una vida saludable, Mica ha sumado una nueva iniciativa en su hogar: una huerta familiar. Ubicada en un rincón remodelado de su nueva casa, la huerta incluye una variedad de vegetales y hierbas, como tomates, lechugas, albahaca y perejil. "Me encanta que podamos tener ingredientes frescos directamente de nuestra casa", comentó.
La huerta no solo refuerza la alimentación saludable de su familia, sino que también refleja el interés de Mica Viciconte por la sostenibilidad y el autocultivo. Este espacio se ha convertido en un lugar de conexión con la naturaleza y una forma de enseñar a Luca sobre la importancia de cuidar el medio ambiente.