Allá por el mes de octubre pasado (parece una eternidad de tiempo), la casa de Gran Hermano abría por primera vez sus puertas en lo que se conocía como la nueva edición 2022 del reality. Y fue entre los 20 participantes que ingresaron al formato que se encontraba Romina Uhirg, hasta entonces alguien desconocida para muchos.
Pero fue en el día en que Santiago del Moro presentó a cada uno de los flamantes hermanitos que, al referirse a la ex diputada detalló que si bien era la primera vez que ingresaba a un programa así no era la única vez que se había animado a realizar un casting para el ciclo de Telefe.
De esa forma y hace dos meses atrás, Romina, de 34 años, se presentaba como una referente del Frente de Todos, y contó que cuando tenía 17 había audicionado para entrar a la Casa, pero que no lo había logrado. Lejos de aquel momento y con ansias de fama y popularidad, Uhirg logró su cometido, quedó seleccionada, dejó la política e ingresó al juego.
"Me encanta entrenar, me cuido mucho y realmente soy muy insegura conmigo misma. ¿Si me hice operaciones? Qué no me hice... Me hice las lolas, me hice la panza, cada tanto me pongo bótox... Tengo mucho carácter, pero soy muy amiguera y muy leal. Aunque a la casa voy a jugar y no voy a hacer amigos", detalló la hermanita que, además, es madre de 3 hijos.
Pero lo que hasta ahora no se sabía era otra especialidad de Romina, la cual también ejerce y le sirve de fuente de ingreso económico. Es que con el paso del tiempo los participantes comienzan a abrirse, charlar y revelar detalles que hacen a la vida privada. Y fue en una charla íntima en el cuarto de chicas que la Uhrig se confesó.
"Como se nota que no me estoy haciendo los pies. Yo se hacer todo esto, lástima que no tengo las cosas. En realidad, yo trabajo de esto", confesó Romina.
“Como se nota que no me estoy haciendo los pies. Yo se hacer todo esto, lástima que no tengo las cosas. En realidad, yo trabajo de esto”, remato Romina en diálogo con Julieta y mientras con una lima intentaba acomodarse las uñas de los pies. ¡Mira vos! La exdiputada tenía una changa oculta.