Indignante. La carta de presentación de Martina Stewart en Gran Hermano distó enormemente de una descripción amable o que genere empatía. Todo lo contrario, la joven gritó que le “dan asco” los bisexuales, lo que se activó una oleada de críticas y reflexiones de miles de personas.
La reciente eliminada del reality, Mora, abordó esta repudiable concepción de la profesora de educación física. La confesión del dolor se produjo en LAM, donde visitó el piso para charlar mano a mano con Ángel de Brito, y también con el panel de las angelitas.
En ese contexto, la misionera primero especificó que dentro de la casa más famosa de la televisión pululaba un coincidente pensamiento generalizado contra los homosexuales. “Los comentarios homofóbicos dentro de la casa fueron un montón, está lleno. Los primeros días trataba de frenarlos, pero después al estar todo el tiempo pidiendo por favor que no hagan esos comentarios te pasan por encima”, explicó.
Hasta que Yanina Latorre metió el dedo en la llaga con una filosa, y oportuna, pregunta a Mora: “¿Martina es homofóbica?”. Así, la concursante narró todo lo que experimentó con Stewart: “Es cierto que escuché comentarios que un poco los frenaba. Ella cuando yo conté que me gustaba estar con mujeres, Martina jamás sentí un rechazo, cero”.
Pero luego, la misionera exteriorizó la indignación al enterarse aquella revelación de Martina sobre su repugnancia a los bisexuales: “En la charla cotidiana si se le escapaba un comentario que le decía ‘Marti no está bueno` mas que eso no. Jamás me imaginé que entraba diciendo que le daban asco los bisexuales”.
Y en esa misma sintonía, la eliminada del reality ponderó su incursión en el programa por su diversidad, por su libertad sexual. "Se rompió el estereotipo conmigo, por esto de la pareja abierta, por mis gustos, mi físico. Creo que faltaba un poco de eso en la casa", consideró.