Hace un tiempo, en junio de 2021, Moria Casán dio una enorme sorpresa al anunciar su "ingreso" a una de las familias políticas más importantes de la Argentina. En el mismo momento en el que blanqueó su romance con Fernando Galmarini pasó a ser, también, una especie de "suegra" de Malena Galmarini, hija del histórico dirigente peronista, y de Sergio Massa, marido de la presidenta de Aguas Argentinas. Ahora, la diva apoyó con fervor y buenas vibras la designación de su "yerno" como superministro de economía.
Massa, hasta ahora presidente de la Cámara de Diputados, pasará a estar a cargo de una "cartera XXL" que incluirá los ministerios de Economía, Producción y Agricultura y también de los organismos que encaran las negociaciones con los distintas entidades de crédito multilaterales. Enfrenta un enorme desafío: resolver la crisis económica y social que agobia al país. Si lo consigue, se dice en los corrillos políticos, su carrera presidencial se habrá allanado definitivamente.
Moria y Galmarini recibieron la noticia en un viaje que llevan adelante por el exterior del país y por supuesto que no fueron ajenos al estratégico movimiento de piezas que encaró al gobierno nacional. "Estamos en una especie de luna de miel, es extraordinario lo que estamos viviendo", escribió ella, hace unas semanas, desde una playa de Portugal. No imaginaba lo que estaba por suceder.
Pero con el hecho consumado y con Massa como nuevo "hombre fuerte" de la política argentina -algo así como un primer ministro al estilo europeo, alguien que no ocupa la primera magistratura pero acumula poder y capacidad de decisión- Moria hizo un alto en sus placenteros días de paseo, salidas y disfrute para escribir un texto donde respalda la nueva función de su "familiar".
"Enhorabuena todo lo que ocurra para que nuestra amada Argentina siga adelante, mientras tanto yo sigo de honey moon con el suegro de Sergio Massa y padre de Malena Massa. Militando la vida", escribió Moria en su cuenta de Twitter, donde la siguen 3,1 millones de personas.
Los usuarios no perdieron la oportunidad para pedirle -la enorme mayoría en broma, pero algunos pocos en serio- que asuma como Secretaria de comunicación, el cargo que ahora ocupa Gabriela Cerrutti. "Cuando te hagan una pregunta que consideres impertinente o fuera de lugar, les gritas "el decorado se calla" como hacías en el Bailando y todos vamos a ser un poco más felices", le pusieron sus fanáticos.