A poco de haber presentado Casi Muerta, su más reciente film dirigido por Fernán Mirás, la artista uruguaya brindó varias entrevistas y fue en una de ellas donde se refirió a la maternidad, a los cambios que trajo aparejado en cuanto a la filosofía de vida y cómo repercutió en su forma de ser.
Feliz con el estreno de la película que protagoniza y haciendo referencia al título de la misma, Natalia Oreiro habló de los miedos a la muerte que atraviesa desde la llegada de Merlín Atahualpa y explicó por qué decidió dejar de hacer ciertas actividades que antes le resultaban divertidas.
En una entrevista íntima con la periodista Fernanda Arena para el ciclo Chicas pochocleras de C5N, la actriz y cantante reconoció que desde que tuvo a su hijo le cambió mucho la percepción sobre la muerte. A tal punto que la ex conductora de Quien es la máscara decidió dejar a un lado los deportes y actividades que puedan poner en riesgo su vida.
“Cambiéo ciento por ciento. Antes no lo pensaba. Para mí la muerte le pasaba a otra persona. Era esa cosa de ser invencible. Hacia deportes de riesgo”, comenzó a destacar Oreiro, sincera y franca, en ese mano a mano para la señal de noticias.
NATALIA OREIRO CONTO COMO SU HIJO INFLUYO EN SU FORMA DE VER LA VIDA
En cuanto a lo que significa tener un hijo, fruto de su relación con Ricardo Mollo, Nati sumó: “A partir de que fui mamá me convertí en una persona con mucho miedo a ciertas situaciones con posibles riesgos porque no puedo no estar para mi hijo. A veces es difícil pero hay que trabajarlo. Y también hay que vivirla”.
“El miedo a veces te paraliza. Porque salís a la calle y también te puede pasar algo. Pero bueno, ahora tomo ciertos recaudos que antes, de hecho, no tomaba y que ahora lo veo con otros ojos”, cerró Oreiro quien disfruta plenamente de su rol como mamá.
