Días atrás, Nazarena Vélez contó los detalles de lo mal que la pasó en la época en que consumió anfetaminas para adelgazar. Cuando su carrera resurgió en popularidad, la actriz encabezaba en Calle Corrientes, había vuelto a trabajar en televisión y su exposición creció notoriamente.
Una década después, “plantada” de otra forma ante la vida y habiendo pasado por pérdidas irreparables, la también productora teatral habló de una de las etapas más vulnerables de su vida.
“Mucha gente sabe lo peligrosas que pueden resultar las mágicas pastillas para adelgazar, las anfetaminas y a sus derivados. Fui adicta por diez años. Me odiaba, odiaba a mi cuerpo. No sabía las consecuencias y me pude haber muerto. No la pasé bien, la pasé como el orto”, reconoció Naza.
OTRA VEZ LA ESTETICA
Lejos de aquella mujer que supo consumir sustancias que no le hacían nada bien, hoy Naza está feliz con su realidad. Sin embargo, sus seguidores hacen hincapié en su imagen actual. Para muchos de ellos tiene sobrepeso.
Enojada y molesta con los comentarios que le llegan a través de las redes sociales, la Vélez hizo un categórico descargo, sin “pelos en la lengua”.
“En redes sociales me ponen "que gorda que estás, que redonda que estás". Redonda tengo la de abajo. A veces me da…digo, esta gente, que mala leche, ¿no? Que mala onda, que innecesario”.
“Yo no me metería en el Instragam de una persona X para ponerle un chanchito. Si me cae como el orto y me parece que es un chancho, me lo guardo para mí, mínimamente”
"Esa cosa maliciosa de que te digan "puede ser que estés más gordita", hizo hincapié la actriz.
“Sigo tratando de entender estar mentes enfermas que creen que pueden lastimar. Si tengo una cara redonda, ¿qué pasa?, ¿dónde está el problema? Me pongo la bicha para atrás y la muestro: cara redonda. Parece que me dieron un sartenazo en la cara”
“¿Cuál hay? Estoy re contenta con mi cara redonda. ¡No sabés lo que gar... con esta cara redonda! ¿Qué te importa mi cara redonda? Esa cosa maliciosa de que te digan "puede ser que estés más gordita". Uno tendría que aprender de esas cosas”, invitó a la reflexión.
“Yo también puedo cometer ese error. A veces la veo a Barby y le digo "estás más flaca". ¿Cuál es el comentario? Estás más gordo, estás más flaco, estás más pelado, te creció el pito… Hay comentarios que hay que aprender a guardárselos”
“Muchas veces uno lo hace sin querer y otras, en líneas generales, como pasa en las redes sociales, te lo hacen a propósito como diciendo: "eh, gorda de mierda". Hay mamurri, sabés lo que te falta caminar”, finalizó, con cierta ironía.