A pocos días de dar a luz, Nicole Neumann tuvo su primer evento familiar: el cumpleaños de Sienna. Una de sus hijas llegó a los 10 años y fue la protagonista de una reunión familiar y con amigas, en la casa de la modelo, a la que ambientó especialmente para la ocasión.
Nicole hizo preparar una mesa larga con distintas cosas ricas bajo la temática de sandía porque, al parecer, es una de las frutas favoritas de la peque. Sobre un mantel en color blanco para que de destaque todo, publicó un video en sus redes sociales donde se vio todo lo que hubo para comer en la fiesta.
Desde medialunas rellanas con jamón y queso hasta variedad de golosinas, la niña tuvo el festejo que se merece al haber llegado a su primera década de vida, del cual participaron algunas de sus compañeras de colegio, las que son más apegadas a ella, y su tía Geraldine, con quien la nena tiene una relación increíble.
Uno de los momentos más emocionantes del evento, por la tarde, fue cuando Sienna sopló las velitas en una torta decorada con gajos de la fruta rodeada de todos sus seres queridos. Fue el propio Manu Urcera, papá del nuevo bebito de la familia -Cruz- quien se encargó de presidir ese momento.
NICOLE NEUMANN ENFRENTO LAS CRITICAS POR SALIR MAQUILLADA DE LA CLINICA
Al momento de obtener el alta médica tras dar a luz a su cuarto hijo, Nicole llamó a su maquilladora y peinadora de confianza para retirarse radiante del centro médico donde fue el nacimiento. Compartió las imágenes en sus redes sociales mientras la producían... y le llovieron las críticas.
"Vamos a charlar un poquito. Hace mucho que no aparezco por razones obvias, pero estuve leyendo cosas. Me da mucha gracia, la verdad, sobre todo mujeres que no tienen ni idea cuál es la realidad, la situación del otro, pero están ahí al pie del cañón para criticar, para tirar mala onda, para decir un comentario desagradable sobre algo que ni saben cómo pasó o cuál es la interna...".
"A ver, veníamos hablando con mi amiga Luli, que es maquilladora, de que siempre veía salir a todas las mujeres espléndidas de las clínicas: peinadas, maquilladas. Y yo nunca pasé así el alta de mis hijas. Entonces, un día estábamos charlando y me dijo: ‘Che, quiero ir a conocer a Cruz’. Le contesté: ‘Dale, venite, y de paso, traete unas cositas, y ya que estamos hacemos lo que dijimos para salir de la clínica divina’”, se defendió Neumann.
“(Luli) es una íntima amiga. Vino a conocer al bebé y, ya que estábamos, me arregló un poquito. Me divertía, después de estar tres días encerrada. Obviamente, tengo la panza hinchada, me duele la cicatriz, y todo eso… Pero, ¿voy a mostrar eso? No. Son intimidades mías, de mi marido, y de mi bebé, en el peor de los casos. Y muestro lo que tengo ganas”.
