Un nuevo capítulo en la pelea de Nicole Neumann con Fabián Cubero se escribió horas atrás cuando el exdefensor de Vélez publicó en sus historias de Instagram la foto de un asado y contó que esperaba a sus hijas Indiana, Allegra y Sienna con esa comida.
Amante de los animales y vegetariana militante, Nicole tomó tomó este hecho como una clara provocación hacia su persona y aprovechó la pregunta de Tomás Dente en Nosotros a la mañana, el programa donde es panelista, para hacer su descargo.
"¿Sentís que realmente quiso darles de comer o fue una mojada de oreja a tu persona, después de haber proclamado durante muchísimo tiempo el no consumo de carne?", le preguntó su compañero.
A lo que Nicole respondió poniendo el foco en la libertad de elegir que tienen sus hijas. "No sé, para mí no es sorpresa. Yo siempre dije que ellas comen carne. Yo no las obligo a no comerla. Yo en caso vivo con una filosofía, les transmito lo que me parece que es mejor para su salud y, sobre todo, para convivir con el medio ambiente, con los otros seres sintientes. Trato de transmitirles esa empatía, ese cuidado. Pero bueno, son chiquitas, con el tiempo irán decidiendo", expresó.
Luego, se refirió a Cubero y reconoció que se trató de una provocación "Cuando no están conmigo, yo no puedo andar controlando. Pero esto es moneda corriente, no me sorprende para nada. Esto es lo menos. Es la punta del iceberg, abajo es… Ya nada me sorprende", dijo con resignación.
También se mostró comprensiva con su hijas y el cosumo de carne. "A mí también me gustaba la carne, no la dejé, hace 27 años, porque no me gustara, la dejé por una filosofía de vida, por mi amor a los animales y para no contribuir con esta industria tan cruel. Pero a mi hija más chiquita y la más grande las veo más preocupadas por el medio ambiente. La del medio es súper carnívora. Vamos a ver qué pasa", explicó.
Por último, Dente inistió con el gesto de su exmarido. "Lo de Cubero, lo de mostrar la carne en primer plano, a mí me sonó a provocación", opinó. A lo que Neumann respondió con tranquilidad: "Eso ya es del otro, no es mío. Yo te puedo hablar por mis acciones y actitudes".
