Era un clásico, dos rivales que se paraban en veredas opuestas y generaban feligreses bien diferenciados. Desde hace décadas que Pampita y Nicole Neumann representaban dos universos distintos, como el obvio morocha y rubia. Ambas empezaron muy jóvenes a construir sus carreras en el modelaje y luego ganaron terreno en los medios.
Esa confrontación histórica pareciera arribar al puerto de disolución de ese halo de enemigas. Todo empezó con la empatía que demostró Carolina Ardohain hace semanas, con la confirmación del contagio de Covid-19 de la blonda. Le deseó pronta recuperación y sobre todo le “pidió” a Fabián Cubero que se transforme en el papá ideal para asistir a las tres nenas.
En su retorno a Nosotros a la mañana, Nicole le agradeció todos esos gestos y dijo: “Se puso en mis zapatos y me supo entender. Quiero agradecerle”.
Cuando la devolución de gentilezas ya era un gran avance, Pampita le sumó un capítulo más a este acercamiento de partes. En su programa de NET TV, la morocha abordó el tema, tras una pregunta de Hernán Drago, quien le dijo: “¿Pinta el café para Pampita y Nicole?“.
"Nosotras estamos grandes para engancharnos en la pelea la rubia y la morocha. Fue hace 20 mil años", dijo Pampita.
Ahí se vino lo más novedoso, una conceptualización muy interesante de la mujer de García Moritán: “Fue auténtico lo que pasó acá. No hubo ningún interés para ninguna otra cosa. Nosotras estamos grandes para engancharnos en la pelea la rubia y la morocha. Fue hace 20 mil años. Siento que como mamás tenemos que darle el ejemplo a nuestros hijos”.
Frente a la consulta de sus compañeros de piso sobre si existió un mensaje privado, Pampita aclaró con muy buena onda: “No necesito que me escriba ni mucho menos. Se dio naturalmente y no se espera más que esto”.
"No vale la pena una entrevista juntas, habría mucha presión exterior y no sería natural", sostuvo Carolina.
Inmersos en un acontecimiento de tal magnitud, como una reconciliación rimbombante, los panelistas soñaron con una entrevista juntas, una especie de transmisión de un momento único. Respecto a ese escenario, Pampita tuvo sus reparos:“Cuando hay entrevistas juntas hay mucha expectativa mediática y eso te quita mucha naturalidad. Hay mucha presión exterior que no permite que seas natural, que estés en su mejor versión. No vale la pena ese show mediático. No es necesario. Siempre que pasan este tipo de entrevistas tan fuertes es para quilombo“.
Para concluir el tema, Carolina volvió a ponerle buenas intenciones y sostuvo: “Veremos qué pasa, el tiempo acomoda todo. Ojalá esto inspire a muchas mujeres para que se empiecen a tratar bien entre ellas“.
