El fin de semana en la trasnoche de radio Pop debutó Soy tan biutuful, el nuevo programa liderado por La Barby y Pampito, dos de los ex compañeros de BDV de Angel de Brito. Por tal motivo, el conductor de LAM salió al aire en la primera emisión a fin de desearles suerte… y contar anécdotas divertidas al aire junto a ellos y otros famosos.
En ese marco, el periodista de Implacables y Mañanísimas le consultó al invitado que estaba del otro lado en comunicación telefónica, “¿por qué no bailás? Viste que hay algunos periodistas que bailan”. Sin escaparle a la pregunta de su colega, el jurado de Showmatch dio su argumento.
“En realidad, la gente que baila en televisión, y no hablo de nadie en particular, por las dudas, en general, me dan a esos muñequitos de los estacionamientos”, disparó de Brito quien continuó: “Porque aparte te ponen música y te dicen bailá”.
“No podés estar un minuto bailando más o menos bien. Siempre es espantoso el movimiento, el primero, y queda ese”, continuó el animador de Los Ángeles de la mañana. Reafirmando la teoría del conductor de El Trece, Sebastián Perelló Aciar reveló al aire una premisa que le indicó el propio Angel en sus comienzos en el medio.
“A mi De Brito me enseñó que un periodista no baila en televisión y para mi es como la biblia”, recordó el panelista. A lo que el periodista de LAM bromeó: “Mirá que gran enseñanza que te dejé”. Dando por cerrado el tema, y si bien no dieron nombres, bien podría suponerse a quienes se referían con el hecho de ser periodistas y bailar al aire. ¿Palito para Rodrigo Lussich y Adrián Pallares?
"La gente que baila en televisión me da a esos muñecos de los estacionamientos. No podés estar un minuto bailando más o menos bien", lanzó el periodista en cuanto a la actitud de alguno de sus colegas.
Continuando con la charla de amigos, y sacando a relucir más intimidades de famosos, llegó un momento en el que Angel revivió cuando años atrás fue convocado para participar del carnaval de San Luis junto a otros famosos y contó una intimidad del final de fiesta.
“Cuando volvimos eran como las 4 de la mañana y estaba Mirtha Legrand sentada en una mesa, impecable, como cuando conduce el programa y nos pidió que nos sentemos con ella. Nos pedía chimentos y cuando llegó Marina Calabró, la humilla y le dijo todas esas cosas que ella dice. Después llegó Mariano Iúdica y le dijo que no grite tanto y hable más bajito”, recordó con humor Angelito.