La tan esperada llegada de Wanda Nara al país se concretó. Tanto como en la entrevista con Susana Giménez donde iba a romper el silencio, el arribo de Wanda con sus cinco hijos fue, sin duda, uno de los momentos más esperados de los últimos tiempos.
Acompañada por sus tres varones y sus dos nenas, con seguridad privada que la escoltó y con predisposición a contestar a la prensa que la esperó en el Aeropuerto Internacional, la ex vedette pisó tierra firme. En diálogo con Los ángeles de la mañana, Wanda aseguró entre otras cosas que la relación con su marido, Mauro Icardi, está muy bien a pesar del escándalo que protagonizaron por su infidelidad con la China Suárez. Además, informó que el jugador vendrá al país para las Fiestas de Fin de Año.
Pero más allá de eso, Wanda se encontró con una grata sorpresa a consecuencia de las turbulencias que vivió en su pareja un mes y medio atrás. Mientras transitaba los pasillos de Ezeiza, después de viajar en primera y palpitar el encuentro con su hermana Zaira y su madre, Nora, la gente le hizo saber lo que piensa del Wanda Gate, luego del drama que vivió en su vuelta a Buenos Aires.
Como sucede cuando se enfrentar River y Boca, los argentinos “tomaron partido” en este triángulo amoroso y Wanda salió beneficiada del conflicto de infidelidad. Por lo menos así se lo hicieron saber en sus primeros minutos de vuelta en la Argentina.
En el programa de Angel de Brito contaron que, de fondo, mientras le hacían una entrevista a la rubia y caminaban por los pasillos del aeropuerto con ella, se escuchaban los gritos de aquellos que estaban allí: “Wanda Goleadora” y “grande Wanda”, luego de que ella amenazara a la China Suárez.
Y no sólo eso… Además, la rubia fue protagonista absoluta de recibir felicitaciones por cómo sobrellevó el engaño de su pareja y la forma en que decidió seguir adelante con la familia que tiene armada con él. Si la primera impresión es la que cuenta, hay que decir que Wanda tiene el aguante del pueblo.
