La actual edición de Gran Hermano ya tiene a sus líderes instalados. Los autoproclamados padres de la casa más famosa de la Argentina son Lisandro Navarro e Isabel De Negri. Sin embargo, esta decisión no es del agrado de todos, más que nada de Furia.
Como pasó en el programa anterior, dos competidores se hicieron cargo de qué y cómo pasaban las cosas dentro del reality. La idea es mantener el orden y que no sea una jungla con la supervivencia del más fuerte. Esta fue la misma tarea que ya hicieron Alfa y Romina Uhrig el año anterior.
Juliana es la que siempre está remarcando lo que ocurre en el ciclo de Telefe. Si hay algo que no le gusta, lo dice delante de todos. Justamente durante la gala de eliminación aprovechó para reírse y hacerle el reclamo al asesor financiero y la abuela hot.
Todo comenzó cuando Santiago del Moro le pidió a Martín Ku que revisara el sobre para saber si superaron la prueba semanal. Al confirmar que si lo lograron, preguntó quiénes se encargarían de hacer las compras para la semana. Carla y Scaglione se ofrecieron.
QUÉ DIJO FURIA SOBRE LISANDRO E ISABEL
Ante la consulta del conductor, Furia reaccionó con mucha ironía: "El papá nos dejó, la mamá también... Nos vino a hablar un hijo y nos dijo 'las dejan ir a comprar a ustedes'. Nosotros estábamos como 'que me importa, amiga. Vamos a ir igual, amiga".
A lo que Isabel De Negri retrucó: "Está perfecto, pero no somos ni padre ni madre. Jugamos. Las chicas lo van a hacer bien". Y Lisandro Navarro sumó: "No somos padre ni madre. Tengo 33 años. Me van a matar. Lo hablamos el otro día en la cena y nos pareció bien".