Felipe Fort es muy joven, acaba de cumplir los 18 años junto a su melliza Marta y está dispuesto a hacer grandes cambios en la empresa familiar, toda una tradición chocolatera en la Argentina desde principios del siglo pasado.
Sin embargo, las ideas frescas y originales de Felipe están siendo resistidas por algunos miembros de su familia, que no ven con buenos ojos hacer de sus tradicionales golosinas un tributo a Ricardo Fort, acaso la figura mediática más querida y célebre del país.
Felipe ya lo había anticipado hace un tiempo, generando fiebre en los fans de su papá: lo primero que haría al incorporarse al directorio de la empresa sería agrandar el Marroc y, además, reemplazar las frases románticas del Dos corazones por frases famosas del Comandante.
Y ahora, que acaba de llegar al país tras una estadía en Estados Unidos, donde festejó su cumpleaños y donde planea irse a vivir en algún momento, el adolescente adelantó que no va a poder hacer todo lo que se propone, al menos, por ahora.
"Volví porque quiero estar en la empresa", contó, al arribar a Ezeiza y ser interceptado por los móviles. "El Marroc más grande queremos hacer y quiero hacer un bombón al estilo de Dos corazones, con un estilo parecido, no el mismo, pero con frases de Ricky", dijo.
"Para algunas cosas me dieron el visto bueno pero para otras cosas no. El Dos corazones con las frases de Ricky me dijeron que no, pero el Marroc está más encaminado", aseguró, sobre la reticencia que demuestra su familia, especialmente su tío Eduardo, para algunas de sus iniciativas.
Además, otra de sus ideas, sumar muñequitos de Ricardo al Jack con sorpresa, tampoco llegó a buen puerto. "Con Eduardo charlamos las ideas y me dicen ´vamos viendo´. Si le gusta me lo dice y si no, también".
Feli también respondió a lo que había dicho su primo, Thomas Fort, sobre que no estaba listo para dirigir la empresa. Humilde, señaló: "La realidad es que no tengo ningún estudio, estoy estudiando pero no he terminado nada. En cierto punto tiene razón".
