En los ’90 su nombre estuvo asociado a un exitazo televisivo. Entonces, Celeste Pisapia (43) disfrutaba de las mieles de la fama de Montaña rusa, la tira juvenil emitida por El Trece, sin embargo sentía que tenía una asignatura pendiente: pasar por la universidad.
Si bien después de aquel mítico programa, en el saltaron a la fama actores de la talla de Nancy Dupláa, Esteban Prol, Gastón Pauls y Diego Ramos, ella actuó en otros programas como Floricienta, Los Roldán y Como vos y yo, fue en Montaña… donde se hizo conocida. Pero algo le faltaba. Por eso, decidió estudiar la carrera de traductorado, en la que se recibió.
“Siempre estuvo pendiente la necesidad de hacer una carrera universitaria", dijo.
“Cuando nos juntamos con los chicos del elenco y ponemos alguna foto en las redes nos piden que volvamos. Hay personas de nuestra generación que en ese momento se identificaron con nuestras historias y quizá se lo cuentan a sus hijos, que ahora pueden vernos en Volver”, le dijo en una reciente entrevista a La Nación.
Después habló de su necesidad de estudiar, lo que -según explicó- se dio de modo natural. “Siempre estuvo pendiente la necesidad de hacer una carrera universitaria y no por un mandato familiar, porque en mi casa tuve mucho apoyo de mis padres que me alentaron a hacer lo que me gusta”, detalló.
“Soy docente auxiliar en algunas materias de la facultad en la que me recibí", comentó.
“Hoy lo miro a la distancia y sé que el futuro no depende de tener un título universitario. Sin embargo, tenía ganas de estudiar y se dio de esa manera”, explicó.
Celeste, alejada de los medios, está abocada a su familia. Casada hace 10 años con un arquitecto, juntos tienen un hijo y se desempeña como traductora y docente. “Soy docente auxiliar en algunas materias de la facultad en la que me recibí. Hoy mi vida se reparte entre el trabajo y mi bebé, que es muy chiquito. Estoy disfrutando a la familia. Milo tiene 15 meses y es un bombonazo”, admitió.
