La historia entre ellas no viene bien desde los tiempos de El Rossi, el polémico marido de Iliana Calabró que anduvo metido con las “chanchadas” del gobierno de Néstor Kirchner y que enfrentó mil y una denuncias por la Rosadita. Ya lo dijo en su momento Evelyn Von Brocke: “Marina e Iliana tienen una guerra de egos y de protagonismos".
Lo cierto es que un móvil desde Carlos Paz, Iliana Calabró (55) parece darle la razón a todo. Hoy, dijo, palabras más, palabras menos, su relación con su hermana Marina esta muy floja de papeles por diversas razones.
Según la actriz, la periodista de 48 está muy ocupada y es complicado tener una comunicación fluida. "Con Marina hablamos cuando ella tiene tiempo", lanzó en el programa de Carmen Barbieri, Mañanísima (se puede ver por Ciudad Magazine).
"Pero sí, hablamos. Hablamos… Ahora hace un tiempito que no hablamos", alargó, dando a entender que la historia viene complicada. El que se metió ahí fue uno de los panelistas, que dijo ser su amigo y hablar a diario con la morocha que sería una de las panelistas del nuevo programa de Angel de Brito en Telefe, luego de rechazar ir con Lussich y Pallares al 13.
"A mí Marina todos los días no me llama…", le contestó Iliana, quien dice estar pasando un verano en soledad tras su separación de Antonello Grandolfo, el empresario italiano con quien llegó a convivir pero que se fue a Italia por la malaria de la Argentina.
La que metió otra vez el dedo fue Estefanía Berardi, la acompañante de Carmen en el mundo del chimento. La rubia le preguntó si la mala onda tenía que ver con el miedo a Marina Calabró contara detalles de su vida privada.
Y allí Iliana fue más que terminal por el trabajo de su hermana, también panelista y periodista: "No tengo intimidades para contarle. Últimamente con esto del aislamiento… Acá me la paso encerrada". ¿Fin? ¿O el comienzo de una nueva pelea familiar?