Natalie Weber empezó con el pie izquierdo este 2021. La modelo, su esposo Mauro Zárate y sus hijos se mudaron a uno de los countries más caros del país, pero no fueron bien recibidos por los vecinos.
Natalie y su clan dejaron atrás los años instalados en Santa Bárbara, otro conocido barrio cerrado pero menos glamoroso que el actual, claro. Y se instalaron en uno de los más cotizados en la zona norte, Nordelta, donde es vecina de Luciana Salazar y Germán Paoloski, entre otros famosos.
Después de armar el nuevo hogar y de empezar a disfrutar de las nuevas instalaciones al definirse que se quedan en el país porque Mauro seguirá jugando para Boca Juniors, Weber y el deportista organizaron una fiesta de "inauguración de la nueva vivienda".
Lejos del escándalo que genera una fiesta clandestina y de su falta de empatía social, Natalie y Mauro -a quien se le apagó la pasión, momentáneamente, en tiempos de cuarentena- cumplieron con todos los protocolos a raja tabla. Convocaron a la cantidad de personas justa, según indican las recomendaciones sanitarias.
Pero a sus vecinos, igual, no les cayó nada bien la reunión que se dio en el mes de enero. ¿El motivo? La música alta y una banda súper famosa contratada. Como toda reunión, no sólo hubo comidas, charlas y algunas bromas…
La música, la variedad de ritmos, también son claves al momento de celebrar una buena reunión. Pero el volumen elevado molestó y mucho a los vecinos… Y se lo hicieron saber a la pareja con una suerte de denuncia interna, que si se destapa podría llegar a un escándalo mayúsculo.