El año pasado, sucedió lo que nadie esperaba: volvimos a ver a Luis Ventura y Marcela Tauro, otra vez juntos en un estudio, después de la fuerte pelea que tuvieron en Intrusos, donde fueron amigos durante años. El mérito fue de Fantino a la tarde, de las circunstancias y de la actitud de los dos periodistas, que no dudaron en dejar la discordia en el pasado para trabajar nuevamente en equipo.
Sobre ese reencuentro con su compañera habló Ventura, sorpresivamente, mientras hacía el balance de su paso por el programa de Alejandro Fantino en Por si las moscas.
“Yo la etapa Fantino la viví con alegría, si tengo que decir algo que me haya incomodado o molestado… me permitió hasta un reencuentro con Tauro”, empezó Luis en el ciclo de La Once Diez.
¿Cómo fue ese encuentro con Marcela? Según el conductor de Secretos verdaderos, “al principio fue muy frío, pero ayudó a recomponer algunas cosas”. “Yo soy un hombre de buena voluntad y ella también, me parece que elegimos olvidar”, se sinceró.
Acerca del problema que tuvieron y que los llevó a distanciarse, Ventura no dio detalles y dijo que “fue algo que pasó en un momento muy difícil de mi vida, cuando estás en carne viva, te echan sal en la llaga, te duele”.
“Yo soy un hombre de buena voluntad y ella también, me parece que elegimos olvidar”.
“El primero que me llamó fue Fantino, evidentemente me quería, me reclutó y cuando tomó la decisión de incorporar a Tauro, tuvo la deferencia de llamar para preguntar y la verdad que yo no estoy para cortarle la plata a nadie, menos el laburo”, agregó.
Sin embargo, trabajar con ella no fue nada fácil en un principio. “Yo estaba enojado mal, me salía la bronca por los ojos y no quería ir en contra de lo que me pasaba”, señaló.
“Pero pasaron los días y yo tuve un problema con Antoñito y me preguntó, y después ella tuvo un tema con la mamá y yo me acerqué, así se dio”, terminó el presidente de APTRA, satisfecho con la oportunidad que le dio el programa.