Cuando Ángel de Brito abrió su cuenta de Twitter para publicar dos imágenes exclusivas, no pensó que se generaría un revuelo tan grande por un motivo totalmente distinto al que él buscaba.
Y es que en las últimas horas, el conductor de Los Ángeles de la Mañana compartió en su red social unas postales de Martín Redrado en Miami mientras aguardaba la fila para poder conseguir una vacuna contra el coronavirus.
Tras el escándalo que sucedió con Yanina Latorre cuando logró que su mamá Dora Caamaño se inoculara, el periodista imaginó que la reacción del público también iba a ser de repudio. Pero se llevó una gran sorpresa al descubrir que la fuerte polémica vino de la mano de la "compañera" del economista.
En las fotos, el político estaba acompañado de una misteriosa mujer, rubia y con el cabello por el hombro, que aguardaba junto a él y que provocó la furia descontrolada de Luciana Salazar.
La modelo, que había afirmado su reconciliación semana atrás, explotó a través de Twitter y disparó duras palabras contra su ¿ex?: ¡¡¡Miralo vos, jugando con las mujeres y apretándome a la vez!!! ¡Lo mejor que me pudo haber pasado para sacarme de encima a semejante lacra de persona para siempre! Lo imperdonable es que manipuló a una menor. Este tipo no vale ni una lágrima. Hay testigos de todo”.
Asimismo, la mamá de Matilda le respondió por el mismo medio a de Brito, quien le consultó si no era cierto que habían apostado nuevamente por la pareja, y Luciana confirmó la situación: “¡Yo jamás miento! Fue exactamente así. Las pruebas me avalan. El día domingo 10 de enero empezamos a salir y hay testigos. Desde ese lado, yo estoy muy tranquila que siempre dije la verdad”.
Pero ante la duda de quién es aquella extraña mujer que se encontraba al lado de Redrado y si realmente sería una nueva pareja o simplemente una conocida, Luciana dispersó todas las preguntas y aseguró que se trataba de una nueva infidelidad.
La confirmación llegó de la mano del mensaje de una usuaria, que le explicó que “Martín es un psicópata” y que siempre habló mal de ella a sus espaldas. Asimismo, agregó que considera que el político también “se divierte intoxicando a las mujeres que lo rodean”, y directa, Salazar apuntó: “No, ella es otra víctima de él”.
¡Durísima!