La jerarquía del multimedio de comunicación de LN+ se compone de varios miembros, liderados por Juan Cruz Ávila, quien toma las decisiones diarias. Sin embargo, las determinaciones más trascendentales, como las contrataciones de destacadas personalidades, se alcanzan mediante un consenso más elevado.
La realidad es que, en este contexto, la aceptación de Viviana Canosa nunca fue unánime; la mayoría de la directiva coincidía en que incorporar a Canosa suponía adquirir un problema a largo plazo. Algunos, no obstante, consideraban esencial contar con una figura tan extrema, especialmente en un año electoral.
Después de las elecciones, el consenso se desvaneció: la presencia de Canosa ya no era tan valiosa, sobre todo porque muchos de sus seguidores la abandonaron tras sus enfrentamientos con el actual Presidente con el que no comparte muchas de las ideas. Además, la señal no veía con buenos ojos tener "una oveja negra" (una opositora) en sus filas.
Viviana era consciente de esta situación, interpretándola como una falta de aprecio por parte de LN+, y se sentía incómoda con la línea editorial ahora oficialista, en la que ella quedaba en desventaja después de haber expresado sus opiniones de manera tan contundente sobre todo para las PASO. A pesar de esto, la señal le ofreció una propuesta concreta para el próximo año, bastante favorable para ella, aunque, según fuentes confidenciales, secretamente esperaban que la rechazara.
LAS AUTORIDADES DE LA LN+ NO QUERÍAN QUE LA PERIODISTA SIGUIERA EN EL CANAL LUEGO DE LAS ELECCIONES
Entre tanto, ocurrieron varios acontecimientos, como comentarios de Canosa cuestionando la libertad de expresión en LN+, lo que generó malestar en las altas esferas del grupo. Estas afirmaron que nunca se le sugirió qué decir o no decir.
Simultáneamente, Canosa tardó en responder a la propuesta, lo que fue interpretado por LN+ como una estrategia de hacerse desear. Hacia finales del año pasado y principios de este, le pidieron amablemente que se definiera, lo que, en realidad, constituía un ultimátum.
Este detalle, aparentemente insignificante, pero sumado a los demás acontecimientos, llevó a la conversación con Ávila donde, de manera "acordada", se concluyó que los intereses de la señal y los de Canosa tomarían rumbos divergentes. En resumen, en LN+, ya no la querían en el aire de sus programas.