El abogado de Dieguito Fernando, Mario Baudry, explicó en su visita a LAM el pasado miércoles 15 de julio la situación de robo que sufrió el conteiner con las pertenencias de Diego Maradona que llegaron desde Dubái. También señaló a Sergio Garmendia, apoderado impuesto por Matías Morla, como el responsable de lo sucedido.
Los hijos del fallecido ex futbolista se reunieron para discutir lo que está sucediendo con los faltantes de su padre y poder dar con el ladrón, cómo así también tomar las medidas legales necesarias en el caso de que se encuentre al culpable y cómo será la repartición de los bienes.
A pesar de que la relación entre varios de ellos no es muy buena, como la acusación de Diego Jr a Dalma por su visita a Nápoles, los hermanos se unieron en la causa, es por eso que el abogado de Dieguito Fernando contó toda la verdad sobre los objetos robados y el posible responsable.
"Faltan como 20 relojes, la gran mayoría son de oro y diamante. Tienen un número de serie, estaban las cajas con el certificado. Si los llevas a una casa oficial, te los retienen si son robados. Los conteiner estaban en manos (a nombre) de (Sergio) Garmendia, un apoderado puesto por Matías Morla. Diego le echaba la culpa al contador de los robos. Cerrados no estuvieron porque Garmendia y algunas personas más ingresaron durante mucho tiempo", reveló Braudy.
Y agregó: "Cuando vamos por primera vez a la baulera, llegó un tercio de lo que había, según nos dijo la gente de la empresa. En la Aduana hay registro de todo. Garmendia quiso entrar una hora después del fallecimiento de Diego, pero los de seguridad no lo dejaron y llamaron a la policía. De los aros no hay nada. Garmendia ahora está citado a indagatoria".
"Había algunas de las remeras que tenía Diego y algunas de las cosas que tenía en la casa de Dubái. Estaban todas las maquinas de gimnasio y las cosas personales, por eso ayer fue muy doloroso. Estaba hasta la cama en la que falleció Diego, temas complejos. Y después había un montón de cosas de Rocío (Oliva)", sumó.
El letrado continuó: "A Diego nunca le dijeron que el contenedor venía para acá y lo estuvo buscando un año. Se repartieron las cosas del dolor. Las cosas caras y las que consideraba importantes para él, como la carta de Fidel, no se repartió nada. Eso va a quedar todo para un museo en Buenos Aires que decidieron los herederos. Todo se distribuyó entre ellos de muy buena manera".
"Las cosas de valor que había eran mínimas a lo que Diego tenía. Él poseía infinidad de raquetas y camisetas firmadas, como la de (Martín) Palermo. De todo el tiempo que Diego estuvo en Dubái, todo quedó allá, o sea que alguien se lo quedó en el camino", concluyó Mario Braudy.