Las redes sociales pueden actuar de un campo de evidencia, porque lo que se siembra en pos de exhibir la cotidianidad glamorosa, o divertida, también se convierte en una especie de prueba de lo que sucede en el entorno de una persona.
En esa trampa cayó Jimena Campisi, la modelo que supo construir una historia de amor con Tomás Constantini y con quien tuvo a su hijo Milo. Resulta que la blonda llenó de contenidos su Instagram con postales en un lugar paradisíaco, Florencia, en la bella nación de Italia.
Hasta todo normal, lucía como un viaje de esparcimiento. No obstante, los detectives de la farándula agudizaron la atención en la ausencia de su hijo y en que siempre se mostraba sola. De ese modo se activaron las investigaciones y se arribó a una novedad rimbombante.
La cerilla de la noticia explosiva la lanzó Ángel de Brito, que posteó en su Twitter fotos de Jimena en los recovecos de esa ciudad italiana y relató la información a la que accedió y que refiere a un amor impresionante, a un romance de la rubia con un jugador de la Selección Argentina.
El conductor de LAM escribió: “Romance Florencia : Nicolás Gonzalez y Jimena Campisi. Ella viajó hace 15 días, ya se conocían de Buenos Aires” . Un tuit que se viralizó con fuerza por las plataformas digitales, por la trascendencia del jugador y la visibilidad de la famosa.
A partir de esta prueba se sumaron más datos del vínculo amoroso, por lo cual cuentan que todo empezó por redes sociales, donde se inició el diálogo y después Nicolás la empezó a ver a Campisi en Argentina, en sus viajes para defender el seleccionado. Hasta que ahora armaron este viaje para disfrutarse mutuamente.