Romina Uhrig fue la gran sorpresa que tuvieron los participantes de Gran Hermano. Su entrada revitalizó la casa más famosa de la Argentina. Sin embargo, tuvo que despedirse de los chicos, pero antes de irse, marcó las diferencias entre su edición y la actual.
La ex diputada estaba muy emocionada por regresar al programa que conduce Santiago del Moro. Si bien fue por una sola semana, alcanzó para que se diera cuenta que lo que ella vivió es totalmente contrario a lo que están atravesando los actuales hermanitos.
Para empezar, la ex competidora del Bailando dijo: "La verdad es que fue muy lindo, me hicieron sentir muy bien los chicos. Recordé un montón de momentos, recordé lo que es estar de vuelta en la casa, esa adrenalina, eso que te da el encierro. Es como revivir un montón de cosas".
Por otra parte, la oriunda de Moreno rememoró su paso por el ciclo de Telefe: "Me emocioné un montón de veces porque me la imaginaba a Juli (Poggio), a Dani (Celis), a Thiago (Medina), a Primo (Marcos Ginocchio), a Alfa... a todos los chicos. Se me vino un millón de recuerdos".
LA DIFERENCIA ENTRE LOS GRAN HERMANO DE ROMINA UHRIG Y EL ACTUAL
"Los chicos me hicieron sentir muy bien. No puedo decir nada de ninguno. Me trataron muy bien, respetaron lo que estaban haciendo. Me voy muy contenta. Me llevo una imagen muy distinta a la imagen que yo tenía de cada uno", sostuvo Romina Uhrig.
Y agregó: "Es distinto la convivencia que verlo de afuera. Se siente muy linda la casa. No siento una energía mala, siento que son todos muy buenos. Mis compañeros había algunos que eran malo, pero de ellos (los actuales GH) no siento eso. Siento buena energía".
