Rosina Beltrán reveló en Gran Hermano cómo fue el trágico accidente de auto donde casi muere. La uruguaya contó cómo sucedió el incidente vial que pudo terminar de la peor manera. Y qué pasó cuando se despertó en la ambulancia. "La chica que manejaba dobló a 140 km, había sacado la licencia hacía unas semanas. Estaba desfigurada, ustedes no saben lo que era mi cara. Tengo una cicatriz".
“Manejaba mi amiga, estábamos en la ruta yendo a buscar a otra amiga. Cuando chocamos, perdí el conocimiento", comenzó su relato Rosina, frente a algunas de sus compañeras del reality de Telefe, que le pidieron conocer la historia detrás del trágico momento.
"Quedé inconsciente, me tuvieron que operar... Casi pierdo la vida, realmente. El médico me dijo: ‘te salvaste porque tenías el cinturón, si no, no te salvabas", recordó la participante uruguaya, sobre qué fue lo que le permitió seguir con vida.
"A mi amiga que maneja no le sucedió nada", aclaró Beltrán, explicando que el choche fue del lado del acompañante, justamente donde viajaba ella al momento del siniestro vial. "Yo no me acuerdo de nada. Pero esa fue una de las cosas que me marcaron en mi vida”, confió Rosina.
QUÉ PASÓ CON LA AMITAD ENTRE ROSINA Y LA JOVEN QUE CHOCÓ EL AUTO
"No se comportó bien después del accidente. No me fue a ver (al hospital) ni un día. Fue horrible para mí", contó Rosina, al ser consultada por si siguió frecuentándose con la chica que manejaba al momento en que se produjo el accidente. "No era de mis más íntimas amigas, pero íbamos las dos solas en el auto. Mi mamá tuvo que llamar a sus padres”.
"Dobló a 140 km, había sacado la licencia hacía unas semanas. Estaba desfigurada, ustedes no saben lo que era mi cara. Tengo una cicatriz. Me desperté en la ambulancia toda con sangre, gritando que quería hablar con mi mamá porque no entendía nada", rememoró Beltrán, sobre los daños que causó lo sucedido.
"Encima, no me querían dejar hablar con mi madre. Yo la escuchaba gritar por mí en el teléfono, en un estado de shock... Agradezco a la vida que me dio otra oportunidad. Gracias a eso que me marcó y me dijo ‘Rosina, viví, disfrutá la vida’. Porque yo siento que no somos conscientes de que hoy podemos estar acá y mañana no sabemos si vamos a estar. Es como que lo damos por hecho y ¿quién te lo asegura? Nadie”, reflexionó la uruguaya.