Atrapa, imanta la mirada, captura la atención. Esa lógica de espiar la vida del otro y contemplar todos sus movimientos produce éxito, al menos en el caso de Gran Hermano, que volvió a gozar de un número de rating importante en la última edición, aunque sin la prepotencia de la temporada de regreso a la pantalla.
Atento a los beneficios económicos, Telefe ya definió que el reality tenga otra nueva camada, luego de la reciente definición que consagró a Bautista Mascia. Por eso, se aguarda que en diciembre se vuelva a levantar el telón y se abra la puerta de esa casa en la que se encerrar decenas de desconocidos ávidos por alcanzar la fama.
En pos de palpitar esta edición y construir expectativa, Santiago del Moro acaba de confirmar que la producción ejecutará un cambio radical, con una maniobra muy singular que seguramente provocará discusiones y activará arduos debates por el tenor de esa jugada.
En su ciclo radial, el famoso animador corroboró esta novedad muy peculiar: “La gente va a poder elegir a algunos de los participantes antes de entrar”. ¿A qué se refería? Costa intervino para describir de qué se trata: “Es como un iglú, pero de cristal”. Todo esto en referencia a un cuarto gigante todo vidriado que se instalará en un shopping.
QUÉ ES LA POLÉMICA CASA DE CRISTAL QUE TENDRÁ GRAN HERMANO
Esta modalidad ya se implementó en Brasil y consta de encerrar a cuatro personas, que aspiran con ingresar al reality, en un cubo transparente, que posee camas, televisión y cocina, para que convenzan a los transeúntes para que los voten y conseguir la entrada a Gran Hermano.
Y en esa sintonía de variaciones para la campaña que se viene, Santiago aseguró: “Van a cambiar cosas en la casa y va a haber lugares nuevos”. Y también se mostró confiado y entusiasmado: “Le tengo mucha fe al programa, va a ser distinto. No tiene nada que ver uno con otro porque depende de la gente que entre, de las personalidades".