La consternación y el impacto sacude los cimientos de la industria del arte, y de toda la sociedad, por la ascensión a otro plano de la genial Selva Alemán, quien apagó su luz brillosa, cálida e incomparable a los ochenta años, durante la tarde de este martes en una clínica porteña.
El mar de lágrimas arrastra con todo a su paso, porque no se avizoraba en el horizonte este triste desenlace para la enorme actriz argentina, esa intérprete de excelsa calidad, que supo maravillar con sus personificaciones y que caló hondo en el corazón de los argentinos.
La noticia se reveló durante la tarde, a través de diferentes fuentes confiables, como el comunicado oficial que emitió la Asociación Argentina de Actores, así como el mensaje que subió a las redes sociales el productor teatral Carlos Rotemberg, de estrechisima relación con Selva y su marido Arturo Puig.
“Con profundo pesar informamos el fallecimiento de la querida actriz Selva Alemán. Extendemos nuestras más sinceras condolencias a su compañero de vida, Arturo Puig, y a todos sus seres queridos en este difícil momento”, publicaron desde la entidad madre de los actores.
DE QUÉ MURIÓ SELVA ALEMAN
A raíz del amor que supo regar durante décadas en la industria, y en los medios, decenas de famosos la despidieron con mensajes muy emotivos. Así como con el correr de las horas se conoció el encadenamiento de los sucesos que derivaron en la muerte de Selva.
En primera instancia, Pilar Smith aportó un panorama de las causas naturales que desembocaron en la partida de la actriz y contó con mucho pesar y congoja: “Selva Alemán falleció de un infarto. Hablé con Arturo Puig, que está destruido. Hermosa Selva. Descansa en paz”.
"Selva se sintió mal en su casa, la llevaron a una clínica y sufrió un infarto"
Por su parte, Carlos Rottemberg le explicó a Teleshow más pormenores: “Se sintió mal esta mañana y pidió un médico a domicilio. Le hicieron un control en la casa y, después, hubo un segundo, porque no mejoró”. En ese sentido, el productor confirmó que la trasladaron a la Clínica Zabala, siempre con la compañía de Arturo Puig, y que lamentablemente no resistió a un infarto. “No tenía ningún un antecedente. Fue muy sorpresivo", añadió.
