Para una modelo y conductora, aparte de su profesionalismo, de cumplir con horarios y requisitos laborales, una de las cosas más importantes es el cuidado de su imagen. Tanto que, a la hora de mostrarse ante las cámaras de tevé o de lucirse en una foto, siempre procuran estar maquilladas, peinadas y bien vestidas. Y esa es una condición que Zaira Nara respeta con exigencia más allá de su belleza natural.
Porque sabe que la producción y los detalles estéticos suman a la hora de lucirse en un trabajo y son una “ventana” de exposición que evita la crítica y que abre las puertas a otras oportunidades comerciales. Pero en las fiestas es lógico regalarse un poco, aunque no quiso ser la intención de Zaira. La hermana de Wanda eligió un vestido en color plata, fiel a la tendencia de moda, que acompañó con unas sandalias en negro que se adaptan a todo tipo de look.
Su cabello había sigo planchado con parsimonia y su make up se destacó por los tonos suaves tanto en sombras como en su labial, otro de los tips de la temporada primavera verano.
Y después de cenar, bailar, compartir la apertura de regalos con los mas chicos, disfrutar con su hermana en una casona del barrio privado Santa Bárbara, en Nordelta y el paso de las horas, la estética de Zaira no era la misma de madrugada, cuando e mega festejo estaba casi llegando a su fin.
Y, pasadas las cinco y media, una amiga la “escrachó” en redes sociales, algo que Nara nunca hubiese querido. A las 5.26 de la mañana, con el día de Navidad que estaba pronto a amanecer, a Zaira se la vio un poco cansada y con el maquillaje corrido aunque reconciliada con su marido, Jacob Von Plessen.
Fue en la foto que publicó Camila De Lellis, una amiga de la familia en la que Nara quedó en “evidencia” a través de un reposteo de Wanda que, sin querer, dejó en al descubierto a su hermana.
