Silvia Süller dejó atrás su vida glamorosa y hoy está felizmente jubilada. La hermana de Guido Süller supo desfilar en las mejores pasarelas, estar en las tapas de las revistas más reconocidas del país y aprovechar al máximo su tiempo en la televisión, la radio y hasta sobre las tablas.
Su vida, a sus 66 años, es muy diferente a la de aquel entonces en donde la mediática era el boom del momento. En el programa de Ángel De Brito, LAM, por América TV, Silvia habló sobre cómo atraviesa su adultez madura y dijo: “Estoy jubilada, pero vivo bien, no me da vergüenza decir que estoy jubilada”.
Las relaciones familiares no es el fuerte de la familia Süller, es de público conocimiento que los hermanos están distanciados y sobre esto la ex de Silvio Soldán expresó: “Estoy peleada con él desde que murió mi mamá en el 2019”.
“No me gusta hablar de él, porque para mí está muerto y enterrado, y le tengo asco, se imaginarán por qué. Es un psicópata, miente todo el tiempo. Si fuera por él dice que me ayudó en la jubilación, pero nunca me ayudó con nada, ni económico, ni moral ni nada. Para mí él no existe. No me importa. Guido es psicópata y mitómano”, afirmó Silvia.
Pero no es al único que considera “muerto” la ex modelo, ella junto a Soldán tuvieron un hijo, Christian, y aunque es muy reservado y no le gusta el ambiente de sus padres se sabe que no habla con su mamá hace un tiempo.
“Hace 15 años que no lo veo, no sé por qué se fue pero está todo bien. Hasta los 18 años estuvo conmigo y un día se cortó la relación. Lloré mucho pero ya está. La vida continúa. ¿De qué te sirve llorar mientras la otra persona se está divirtiendo?”, comenzó diciendo la blonda sobre su hijo, que montó una empresa próspera.
Aunque dejó en claro que el vínculo estaba bien hasta la mayoría de edad de su hijo, Silvia no puede entender que ocurrió entre los dos y agregó: “No me manda mensajes, nada. Es como si estuviera muerto. Pero ya lo asumí. Estuve 28 años de mi vida llorando. No sé por qué fue”.
“Yo me considero, que aunque no existe la perfección, soy una buena persona, una buena mina, nunca les dije que no a nada, nunca les puse un castigo, demasiado tuvieron conmigo”, se lamentó Süller.