Hace unos días, una polémica azotó la vida de Susana Giménez. La famosa fue duramente criticada luego de que su adorada nieta la mandara al frente y revelara que la diva la echo de su casa en Miami y que debido a eso debía dormir en un colchón en un local de ropa. ¡No da!
Según la joven, la Su se cansó de su desorden y malos hábitos, por lo que decidió pedirle que tome distancia y que se mude, pero no lo hizo de una buena forma. Por su parte, la rubia dijo que nada era cierto y que si así fuera, tiene sus razones para hacerlo, por lo que dice, Lucía arruinó en varias ocasiones su vivienda.
Fue por esa bendita razón que las mujeres tienen múltiples discusiones hasta que un día Susana dijo basta y encontró una solución justa para ambas. Un acuerdo, sí. Pero uno groso, donde la diva tuvo que invertir muchísimo capital para que su nieta se marchara de su casa en Miami.
Pícara y perspicaz, Giménez le propuso hacer un trueque, dinero por paz en soledad. Fue así que le reveló a Marley: "Le compré un departamento en Buenos Aires, que todavía no terminó de decorarlo, está desde hace un año. No es enorme, es normal. Y también necesitaba capital para poner este local".
Acto seguido lanzó las condiciones del acuerdo que mantienen con la joven empresaria: "Entonces yo le dije: te doy todo esto, pero en casa no vivís más". Obvio que como buena nieta de una exitosa mujer, Celasco accedió al acuerdo y se marchó de la casa de su abuela.
Y aunque el acuerdo fue bastante justo para Lucia pero no para Susana, quien ligó fue la diva. La gente la destrozó en redes sociales y la tildaron de mala abuela por no apoyar a su nieta y por quitarle un techo donde vivir. Algo irónico ya que Giménez reveló que además de darle el dinero que necesitaba, también le regaló un departamento. ¡Injustos!
