A las hermanas Viciconte las une el amor a Mar del Plata, donde nacieron, y la pasión por el deporte: mientras Mica es guardavidas, Lara acaba de terminar su profesorado en Educación Física. Además, ¡son muy parecidas!
Así se lo hicieron notar a ambas cuando, días atrás, postearon fotos juntas que dan cuenta de que se adoran. Sin embargo, tal como contó Lara a revista Gente, la relación no siempre fue tan fluida entre las chicas, que eligieron seguir caminos diferentes.
Y así como Micaela se mudó a Buenos Aires para crecer como modelo y hacer carrera en los medios, Lara decidió quedarse en La Feliz, donde estudió teatro y baile, y trabaja como instructora de Crossfit con su novio y tiene su emprendimiento pastelero.
"Durante la infancia no nos llevábamos muy bien. No éramos nada compinches. La buena relación que tenemos surgió cuando ella se fue a Buenos Aires a estudiar".
"Durante la infancia la verdad que no nos llevábamos muy bien. No éramos nada compinches. Todo esto, la buena relación que tenemos, de hablar todos los días, surgió cuando ella se fue a Buenos Aires a estudiar, que se fue a la casa de mis abuelos”, aseguró la joven, de 28 años.
“Recuerdos de la infancia con ella no tengo muchos”, admitió, y explicó que el acercamiento se produjo gracias a la distancia: "En ese momento nos acercamos mucho más y ahora nos vemos muy seguido, planeamos viajes para irnos de vacaciones; es otra relación, totalmente distinta”.
Hoy, la menor de los hermanos combina el entrenamiento con la pastelería, y le va bárbaro. “Cocino yo, acá en mi casa, no es que tengo un local porque es algo que me gusta mucho pero no es a lo que me quiero dedicar, lo que quiero para mi vida. Con esto estoy los fines de semana", cerró la hermana de Mica.
