Luego de ser expulsado de Gran Hermano, primero por ir a la platea y luego por elección de la gente, Tomás Holder participó de varios programas, brindó distintas entrevistas y, luego con la gira de prensa, agarró el bolsito y se volvió a Rosario.
Tal es así que, la vuelta del personaje más polémico del reality a su hogar en su ciudad natal se volvió viral ya que, en contra de sus picantes declaraciones, el musculoso muchacho se tomó un micro de larga distancia cuando había declarado que tenía fobia a los colectivos.
Pero en medio de este gran momento de fama y popularidad que atraviesa, y mientras busca la manera de monetizar su alcance con las redes sociales, Tomás decidió regresar a sus orígenes, y con las personas que pertenecen a su círculo de afectos.
Y fue así que, mientras disfrutaba del reencuentro con su novia, de poder pasar tiempo con ella y visitar familiares y amigos, el ex participante de Gran Hermano decidió quedarse el fin de semana en Rosario… por un motivo muy especial: se viene su cumpleaños número 22.
El domingo 6 de noviembre Holder celebra un año más de vida y planea festejarlo con su mamá, sus hermanos más chiquitos, amigos, un tío y su pareja. Recién ahí, después de soplar las velita y estar rodeado de su gente, el tiktoker regresaría a Buenos Aires para seguir participando de los debates que son parte del reality.
El domingo 6 cumplirá 22 años y se autorregalará un auto, el primero en su vida, de alta gama.
Y mientras el público y fiel seguidor del formato especula con la posibilidad de que Tomás pueda volver a la casa en algún repechaje, el escultural y polémico hermanito está en la cuenta para tener un añito más… y cumplir el sueño de su vida: comprarse su primer auto y que sea de alta gama. Según pudo averiguar Paparazzi, Holder estaría entre un Audi y un Mercedes.