Hace unas semanas, la actriz Araceli González destapó una olla que va a ser difícil de cerrar. Sostuvo que luego de su divorcio con Adrián Suar no hicieron la división de bienes correspondiente y afirmó que es accionista de Pol-ka pero no cobra nada. En pleno enfrentamiento, quien dio su opinión al respecto fue Tomás Kizner, hijo de los actores.
Entrevistado por el programa Intrusos, el joven se mostró “tranquilo y neutral”: “Soy el hijo y no puedo opinar. Estoy en el medio. Esto, en algún momento, terminará. Estoy del lado del hijo, de verdad. Estoy bárbaro, complicadas son otras cosas. Cada uno tiene su punto de vista, pero no me duele para nada”.
"A veces hablamos, pero lo que decimos queda en privado. Cumplo el rol del hijo. Son cosas de ellos dos que van a resolver ellos. No me corresponde decir nada porque son cosas matrimoniales. Yo no voy a opinar. Estoy muy bien”, agregó Tomás.
El joven, quien también escogió la profesión de actor, se mostró esperanzado acerca de que en algún momento “puedan resolver sus conflictos”: “Son cosas de matrimonio... Lo único que me une a todo esto es que soy hijo de los dos. Yo cumplo mi rol. Si tienen problemas, ya lo arreglarán. Ellos siempre intentaron no ponerme en el medio. Es difícil pero son dos adultos y saben que yo no tengo nada que ver. Nunca me sentí tironeado" .
Hacia el final, agregó: “Mi mamá es una persona que puede hacer lo que quiera. Los dos tienen criterios distintos y yo soy súper consciente".
Esta semana, Araceli informó vía redes sociales que se encuentra internada por una infección en su cuerpo. Mientras que el productor de Pol-ka emitió un comunicado en donde se defendió de los dichos de su ex.
