Llora el teatro, llora la televisión, llora el cine y toda la sociedad argentina. El dolor arrasa con esta partida, sorpresiva, de la enorme Selva Alemán, quien apagó su luz el martes, producto de un repentino, e inesperado, infarto que padeció en una clínica porteña.
La monumental artista trascendió de plano, pero su legado quedará indeleble, imborrable en miles y miles de personas que disfrutaron de su calidad interpretativa, así como en cientos de seres humanos que la cruzaron en el sendero de la vida y pudieron conocer a una alma noble.
Tras el impacto de la triste noticia, esta mañana se desarrolló el velatorio en una casa muy prestigiosa de Capital Federal, donde se acercaron un sinfín de famosos, que supieron construir historias e interpretar personajes a lo largo de más de seis décadas de trabajo de Selva.
Tras varias horas en ese espacio, en el que se pudieron despedir de la actriz una enorme cantidad de amigos y familiares, llegó el momento del traslado al Cementerio de la Chacarita. Ahí estuvo Paparazzi para registrar la congoja y el sentimiento de amor para Alemán.
EL ADIÓS DE ARTURO PUIG A SELVA ALEMÁN EN LA CHACARITA
Así se pudo vislumbrar el semblante de Arturo Puig, que lució golpeado, lógicamente, en lo más profundo de su ser por tener que desprenderse físicamente de su compañera de toda la vida, esa mujer con la que caminó durante cincuenta años por este planeta.
En ese momento tan complejo de transitar, el actor dispuso del apoyo de muchísimas personas, que estuvieron en la ceremonia y en ese último adiós a una verdadera emblema de la actuación de este país. Hasta el momento, la única expresión de Arturo sobre su estado fue: "Estoy como puedo estar en un momento así, pero voy a salir adelante para enfrentar lo que se viene como corresponde".
